El Ministerio afirma que la automoción de Castilla y León "aguantará el chaparrón" de la crisis

Valladolid.-  El Ministerio de Industria ha constatado hoy que el sector automovilístico de Castilla y León tiene "expectativas muy razonables" para "aguantar el chaparrón" de la crisis y, en el caso de Renault, ha augurado que el plan industrial que asegure su futuro estará listo tras el verano.

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(EFE)

El vicepresidente segundo y consejero de Economía y Empleo de Castilla y León, Tomás Villanueva (3i), y el director general de Industria del Ministerio, Jesús Candil (2i), durante la reunión que mantuvieron hoy con el comité de empresa de Renault para analizar la situación del sector de la automoción.

Así lo ha asegurado hoy en Valladolid el director general de Industria, Jesús Candil, quien junto al vicepresidente segundo y consejero de Economía y Empleo, Tomás Villanueva, ha mantenido sendas reuniones de trabajo con los comités de empresa de Iveco y Renault, que tienen varias factorías en Castilla y León.

Candil ha explicado sobre el futuro de la multinacional francesa en esta Comunidad que "lo más importante" para atacar los problemas de la factoría vallisoletana de Carrocería y Montaje "no es la coyuntura, sino la estrategia", en concreto la consecución de un plan industrial que prevé tener pactado con la empresa antes de que finalice 2009.

"La situación no es boyante pero va mejor de lo que pensábamos", ha dicho sobre Renault Candil, quien ha recordado que "ni siquiera ha hecho falta que utilicen los expedientes de regulación temporal que tiene aprobados la empresa porque ha habido un incremento de demanda suficiente para mantener la situación".

El director general ha ensalzado el trabajo conjunto desarrollado por el Ministerio y el departamento autonómico que dirige Tomás Villanueva, de quien ha dicho que "se está dejando la piel" en la "gran lucha" que mantienen para asegurar el futuro de la automoción en la Comunidad.

El representante del Ministerio ha reconocido sobre el futuro plan industrial de Renault que "no está absolutamente cerrado" pero existen "expectativas positivas de que se culmine" después del verano para que "realmente despeje el futuro a medio y largo plazo".

Se ha referido a la fábrica palentina de Renault, que construye el nuevo Megane y ha visto recientemente incrementada su plantilla al aumentar la demanda, como "una isla" dentro del mar de crisis, ya que la creación de empleo en este contexto es "excepcional" e "inaudito".

En cuanto a las instalaciones de Iveco en Valladolid, Candil ha opinado que se trata de una "fábrica magnífica" en la que "sólo se plantearán expedientes de regulación temporal para aguantar la situación a la largo de 2009".

En palabras del director general se trata de "una operación de resistencia hasta que escampe la situación de los mercados internacionales", pero la ha considerado como un mal menor al destacar que en otros centros de trabajo de Iveco en España lo que se plantea es la extinción de los contratos y, por tanto, despidos.

Por su parte, el vicepresidente segundo ha indicado que "hay que seguir trabajando para concretar todo el proyecto industrial de las compañías en los próximos meses" y se ha mostrado convencido de que "se les dará solución".

En este sentido, ha asegurado que es "razonablemente optimista" sobre el futuro industrial de Renault en Valladolid, porque "vamos conociendo proyectos concretos", aunque ha puntualizado que "falta rematar el trabajo para que a la vuelta del verano, en otoño", se pueda hablar de una "solución" aportada por la empresa para "asegurar el futuro".

Sobre la fábrica de Palencia, ha coincidido con Candil al señalar que esta instalación es "una excepción", al recuperar incluso turnos de trabajo, mientras que en el caso de Iveco, en Valladolid, ha reconocido que lo que necesita la empresa es resolver el "problema a corto plazo" de la falta de demanda de sus vehículos.