El Ministerio no cree que los fabricantes vayan a usar las ayudas como "subterfugio"

Valladolid.-  El Ministerio de Industria no cree que los fabricantes de automóviles vayan a utilizar las ayudas directas comprometidas por las administraciones como un "subterfugio" para incrementar el precio de los vehículos que ponen a la venta, ya que las subvenciones están tasadas desde el punto de vista técnico.

Así lo ha asegurado hoy en Valladolid el director general de Industria, Jesús Candil, quien se ha reunido con el vicepresidente segundo de la Junta de Castilla y León, Tomás Villanueva, y con representantes sindicales de las marcas Iveco y Renault.

Candil ha explicado que, aunque la reunión con las administraciones autonómicas del próximo lunes en el Ministerio servirá para perfilar más las ayudas directas por la compra de vehículos, cuestiones como la rebaja del precio de los automóviles están ya fijadas y las marcas deberán rebajar los 1.000 euros que les corresponde del denominado "precio franco".

El modelo aplicado para otorgar estas ayudas es, en palabras de Candil, "un planteamiento de cooperación para estimular la demanda de vehículos" en el que están implicados por igual los fabricantes, la mayoría de las comunidades autónomas y el Gobierno central, por lo que ha negado que vayan a existir subterfugios que perjudiquen a los compradores.

Sobre la posibilidad de que el Gobierno conceda también ayudas directas para la compra de vehículos industriales de hasta 6.500 kilogramos y sin límite de precio ni emisiones de dióxido de carbono, como sí hace la Junta de Castilla y León, Candil ha reconocido que esta administración autonómica "se adelanta y muy bien" al ofrecer ayudas para esta gama de vehículos.

Candil ha dicho que su departamento "estudiará" esta posibilidad, al igual que la situación de otros mercados de la automoción, como los de las motos y los autobuses, que también han sufrido una caída de ventas.