Condenado a casi 2 años por dar fuego a una habitación con su esposa dentro

San Sebastián.-  Un hombre ha sido condenado a un año y once meses de cárcel por dar fuego a una habitación con su esposa dentro, tras una discusión durante la que el procesado insultó y golpeó a la mujer, quien sufrió diferentes erosiones, hematomas y quemaduras.

Según la sentencia del caso, a la que hoy ha tenido acceso Efe, los hechos ocurrieron sobre las 23:15 horas del 21 de mayo de 2006, cuando el matrimonio, que reside en Guipúzcoa, inició una discusión en un piso de su propiedad situado en Corella (Navarra).

El texto de la Sección Primera de la Audiencia de Guipúzcoa, explica que aquel día el hombre, que padece "una grave" adicción a sustancias tóxicas y al alcohol, llegó "ebrio" a la vivienda y comenzó a discutir con su esposa a la que insultó, amenazó de muerte y propinó diferentes patadas y puñetazos "por todo el cuerpo".

La víctima se refugió entonces en una habitación del domicilio, aunque el procesado la sacó "a la fuerza" y la llevó a un dormitorio contiguo, al tiempo que le decía: "ahora te vas a enterar, hija de puta", tras lo que roció la dependencia con gasolina y le prendió fuego.

A consecuencia de las llamas, la mujer sufrió quemaduras en un brazo, en los dedos de una mano, en una pierna y en la cara, de las que tardó doce días en recuperarse tras recibir el correspondiente tratamiento médico.

Al día siguiente de estos hechos, un Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Tudela (Navarra) prohibió al inculpado acercarse o comunicarse con su víctima, así como acudir a la localidad guipuzcoana en la que ambos residían.

A pesar de ello, el 24 de diciembre de 2006 el inculpado fue a esta población y amenazó a su víctima con cortarle el cuello y darle "dos tiros" cuando ésta se encontraba en un bar en compañía de un amigo.

Durante el juicio por estos hechos, el acusado se mostró conforme con las penas solicitadas por la Fiscalía y la acusación particular que ejercía la perjudicada, por lo que ahora ha sido condenado a penas que suman un año y once meses de prisión por un delito de lesiones, otro de amenazas y un tercero de quebrantamiento de medida cautelar. Además, el inculpado no podrá acercarse ni comunicarse con su esposa durante un total de nueve años.

En función de este acuerdo, el tribunal aplicó al acusado las atenuantes de intoxicación etílica y reparación del daño causado.