Jordi Savall subraya que "es vergonzoso ver la poca capacidad de reacción de la UE en Oriente"

León.-  El musicólogo Jordi Savall, nombrado en 2008 por la UNESCO "Artista por la paz", ha considerado "vergonzoso ver cómo la UE ha reaccionado con tan poca convicción y contundencia" en el conflicto entre israelíes y palestinos, en el que estos últimos han sufrido una "represión bárbara", que "no debiera darse jamás".

ampliar foto

(EFE)

El violonchelista y musicólogo Jordi Savall se deja fotografiar en el trancurso de una entrevista que ha concedido a Efe en León, donde ayer dirigió el concierto 'Encuentro de Músicas de Fuego y Ayre, de la España antigua al Nuevo Mundo', en un ciclo programado en previsión del Centro Nacional de Artes Escénicas y Músicas Históricas que el Ministerio de Cultura se ha comprometido a construir en la ciudad.

"Es una pena que los europeos no tengamos más capacidad de reacción política", ha lamentado en León, en una entrevista a EFE Savall, quien se ha referido a los últimos enfrentamientos en la Franja de Gaza, que "hace pensar sobre la poca capacidad de la UE de dar una voz seria a nivel internacional".

Savall, que dio un concierto anoche en el Auditorio "Ciudad de León", que se enmarca dentro de un Ciclo de Artes Escénicas y Músicas Históricas, que se celebra en la ciudad, ha presentado recientemente su proyecto "Jerusalén", un libro-disco que, según ha dicho, "es un panfleto en favor de la paz y del diálogo" entre oriente y occidente, además de "una prueba de que la paz" entre "todos" los pueblos es posible.

También se ha referido al papel de EEUU en este conflicto en Oriente así como al nuevo presidente de este país, Barack Obama, que "está haciendo las cosas magníficas", ya que "está cambiando en pocos días muchas leyes", si bien "no hay que olvidar que EEUU es lo que es".

En este país, "el sentimiento de estar ligado al mundo judío es muy importante", ya que "la clase judía en EEUU tiene una relevancia considerable y es difícil que Obama pueda cambiar muchas cosas".

Sí ha confiado en que al menos éste demostrará "más sensibilidad" y tendrá "mayor cuidado" para que no se produzcan represiones "tan bárbaras como ha pasado".

Savall (Igualada, Barcelona, 1941) es un violonchelita y musicólogo, especializado en viola de gamba y en música antigua.

Recientemente, ha presentado un trabajo que grabó en Israel el año pasado, desde marzo hasta agosto, y que se llama Jerusalén.

Con este proyecto, hace un recorrido a los 3.000 años de historia de Jerusalén, un lugar en el que "existe una gran dificultad de convivencia" entre las tres religiones monoteístas (judaísmo cristianismo e islám), así como entre oriente y occidente.

Su proyecto "es una prueba de que la convivencia" entre estas culturas "no es una utopía", ha dicho.

Según Savall, la paz será posible, pero "sólo cuando cada parte piense que tiene derecho a estar en un sitio tan emblemático como éste -Jerusalén- pero al mismo tiempo acepte que la otra también lo tiene".

En este disco, que grabó en Israel, participan 40 músicos de oriente y occidente, que demuestran que "es posible estar en armonía y en paz", a través de la música.

Savall llevará "Jerusalén" este año a Polonia, Austria, Alemania así como en Francia, y, en 2010, hará lo propio en Italia, Bruselas, EE.UU y Canadá.

Para Savall, la música es el "primer paso para cambiar la mentalidad y forma de sentir de la gente", ya que "nos hace ver las cosas de forma diferente, a través del corazón, no de la razón".

Su próximo disco, que saldrá el próximo mes de marzo, se centrará en la música céltica y servirá de homenaje a la músicas escocesas e irlandesas.

En 2008, Savall y su esposa, la soprano Montserrat Figueras, fueron nombrados por la UNESCO "Artistas por la Paz".

En esta línea de acercar culturas se inscribe también el concierto que dio el viernes en León, bajo el título "Encuentros de Músicas de Fuego y Ayre", en el que actúan Hesperion XXI, un grupo que dirige Savall y en el que actúa también su esposa como vocalista, así como el grupo "Tembembe Ensamble Continuo de México".

Se trata de un concierto que supone un encuentro entre lo que se hacía en el Siglo de Oro en el Antiguo y Nuevo Mundo (España y México).

Según Savall, "la música es la mejor forma de luchar contra la intolerancia, odio y racismo".