La muñeca Mariquita Pérez es la pieza del mes del museo de Don Benito

Don Benito (Badajoz).-  El Museo Etnográfico de Don Benito ha elegido como pieza del mes de diciembre a la muñeca Mariquita Pérez, con motivo de las fiestas navideñas.

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(EFE)

El Museo Etnográfico de Don Benito ha elegido como pieza del mes de diciembre a la muñeca Mariquita Pérez, con motivo de las fiestas navideñas.

Según ha informado el centro, está fabricada en cartón piedra, mide 47 centímetros y está cubierta con un baño de pintura más oscuro que el de las primeras muñecas, posee un peinado de la época, con un pequeño bucle a modo de flequillo y otros dos más grandes a ambos lados de la cara.

Los ojos son de cristal, con las pestañas superiores de pelo y las inferiores pintadas, al igual que las cejas y los labios; viste un traje rosa claro de raso brocado a juego con el gorro, adornados ambos con cintas rosa, pasamanería y puntillas blancas.

Leonor Coello de Portugal ideó esta muñeca inspirándose en su hija Leonor, una niña de dos años a la que paseaba con una muñeca vestida igual que la pequeña.

Esta mujer encargó la fabricación de las primeras mariquitas en el taller de Bernabé Molina, en Onil (Alicante) y, pronto montó un gran negocio, ya que los mil primeros modelos realizados en noviembre de 1940 se vendieron enseguida en Madrid.

Debido a la fantástica acogida que tuvo la muñeca, Leonor Coello reconvirtió en franquicias de Mariquita Pérez las mejores jugueterías de Madrid, Barcelona, Bilbao y Santander.

El éxito fue tan grande que poco después se creó otro muñeco, Juanín, el hermano de Mariquita, y más tarde, Jaimito, el bebé.

La Mariquita Pérez y todos sus complementos, gorros, zapatos, guantes y botas empezaron a marcar tendencias de moda, y, de esta manera, esta muñeca, sin duda la más famosa de las décadas de 1940 y 1950, se convertía "en el sueño de todas las niñas".

Aunque evidentemente, la mayoría de las familias españolas no se podían permitir el lujo de comprar una Mariquita Pérez ya que su precio rondaba entre 85 y 100 pesetas de la época, y un salario medio estaba entre 5 y 10 pesetas diarias, esta muñeca era conocida por todos, pues constantemente aparecía en programas de radio, revistas de la época, en cromos y en canciones.