Barreda dice que es complicado que el Congreso apruebe el Estatuto en los términos que está planteado

Toledo.-  El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, ha dicho hoy que es complicado que el Congreso de los Diputados apruebe la reforma del Estatuto de Autonomía en los términos en los que está planteado, con el fin del trasvase Tajo-Segura en 2015.

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(EFE)

El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda.

En una entrevista en Antena 3 recogida por Efe, Barreda ha reconocido que no tiene el compromiso del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de que el Estatuto de Autonomía se apruebe en el Congreso, que lo tomará en consideración el próximo día 14, tal y como establece el proyecto de reforma remitido de forma unánime por el PSOE y el PP de la región.

Ha señalado que, además, la fecha del 2015 no es casual, sino que se ha determinado así porque es cuando tienen que estar en funcionamiento los planes de cuenca.

Barreda ha recordado que el agua de los ríos de España es de todos los españoles, "también de Castilla-La Mancha" y la ley dice que la cuenca cedente tiene prioridad, por lo tanto, "nosotros vamos a usarla porque la necesitamos".

Por otra parte, en relación con la financiación autonómica, ha dicho que Castilla-La Mancha "no esta en la peor de las situaciones porque todas las variables nos vienen relativamente bien", por ejemplo, la población, que está aumentando en la región, o la superficie, de 80.000 kilómetros cuadrados.

No obstante, ha apuntado que hay que entender que no cuesta lo mismo prestar servicios a una población de más de dos millones de personas repartidas en más de 900 municipios como ocurre en Castilla-La Mancha que si viven todas en una ciudad.

Se ha referido a los problemas que hubo con la Generalitat de Cataluña, que parecía, según ha dicho Barreda, que quería "llevarnos a los demás detrás" y "ser distintos de los demás", aunque al final se han dado cuenta de que lo importante es dar una solución a la financiación autonómica.

En relación con la crisis económica, ha abogado por que los dos grandes partidos, el PSOE y el PP, hagan un esfuerzo y sean capaces de poner el interés general por encima de los intereses de los partidos, porque "está en juego la buena marcha de España", y ha confiado en que se llegará a ese consenso.