El Gobierno argentino logra un compromiso de los transportistas para que cesen los cortes de las rutas

Buenos Aires.-  Después de diez días de bloqueos que causaron desabastecimiento, un sector de los transportistas de Argentina prometió hoy despejar las rutas y el Gobierno resolvió garantizar la libre circulación de mercaderías.

La decisión derivó en el levantamiento de la mayoría de los más de 300 cortes de carreteras que se mantenían en distintos puntos del país, pero grupos de camioneros decidieron seguir interrumpiendo el tránsito.

El titular de la Federación de Transportistas Rurales, Carlos Di Nuncio, explicó que las entidades agropecuarias, que desde hace tres meses mantienen un duro conflicto con el Gobierno, "ratificaron que se puede cargar cereal" destinado a la exportación.

Sin embargo, posteriormente la combativa Federación Agraria anunció que mantiene su postura de no comercializar granos con destino al exterior, hasta que las condiciones para los productores "no resulten claras y convenientes".

Los propietarios de camiones transportadores de cereales habían iniciado las protestas el 3 de junio pasado para reclamar al Gobierno que retome el diálogo con el campo y que los productores agropecuarios vuelvan a comercializar sus granos.

La huelga comercial de los productores agrarios concluyó en la medianoche del pasado domingo, pero muchos siguen protestando a la vera de carreteras y mantienen retenida su cosecha en los campos para no convalidar los nuevos impuestos a las exportaciones de granos decretados por el Gobierno, el detonante de un conflicto que lleva más de tres meses.

Los prolongados bloqueos de caminos han llevado a una situación crítica a vastas regiones de Argentina, donde ya se siente la falta de combustibles y se agudiza la escasez de alimentos básicos, principalmente en el interior del país.

El compromiso de despejar los caminos fue asumido por representantes de cinco asociaciones de transportistas durante una reunión con funcionarios gubernamentales celebrada en la sede del Ejecutivo.

Tras el encuentro, el secretario de Transporte, Ricardo Jaime, aseguró en una rueda de prensa que el cese de los cortes de carreteras "obedeció a un pedido formulado por la presidenta" del país, Cristina Fernández.

El titular de la Confederación Argentina del Transporte Automotor de Carga, Rubén Agugliaro, quien no participó en las negociaciones, advirtió a su vez que la entidad "no levanta las medidas de protesta porque muchos de nuestros asociados siguen con problemas de costos".

En este contexto, el Ejecutivo dispuso una serie de medidas para "asegurar la libertad de circulación" y solicitó la "participación activa" de las autoridades de las provincias en las que persisten los cortes de carreteras.

El ministro de Justicia, Aníbal Fernández, explicó que el Gobierno "cursó notas a los gobernadores" de las provincias en las que se registran bloqueos de rutas, "solicitándoles su participación activa" en la normalización de la circulación de vehículos.

"Sin armas, sin represión, pero no vamos a permitir que se corten rutas", dijo el funcionario antes de indicar que las fuerzas de seguridad fueron instruidas para "denunciar y, en caso de que así lo ordene la Justicia, despejar" los caminos.

Además de provocar escasez de productos alimenticios y combustibles, la extensión de los piquetes afectó la actividad turística, que según fuentes del sector se redujo sensiblemente para este fin de semana largo, ya que el lunes es festivo en Argentina.

Pese al conflicto del sector agropecuario, el país exportó en los primeros cinco meses del año 28,8 millones de toneladas de granos y subproductos, 893.000 toneladas más que en el mismo período de 2007, según publicó hoy el diario local Página/12.