La cumbre refuerza la alianza del Laboratorio de Nanotecnología y el Consejo de Defensa

Braga (Portugal).-  España y Portugal celebraron hoy la primera reunión del Consejo de Seguridad y Defensa bilateral y sellaron el lanzamiento del Laboratorio Internacional de Nanotecnología de Braga, con el que pretenden situarse en vanguardia de este área de conocimiento.

Fue en la primera jornada de la XXIII cumbre bilateral donde, bajo la presidencia de los jefes de Gobierno de ambos países, José Luis Rodríguez Zapatero y José Sócrates, España y Portugal han reforzado su alianza con esas dos iniciativas y han repasado sus relaciones en reuniones sectoriales que han contado con la participación de nueve ministros españoles y once lusos.

De hito en esas relaciones han calificado tanto Zapatero como Sócrates el lanzamiento del laboratorio de Nanotecnología.

"España y Portugal no estuvieron presentes en las grandes revoluciones económicas de los últimos siglos, pero en el siglo XXI lo van a estar en las revoluciones que representan el conocimiento, la innovación o el reto del cambio climático", precisó el jefe del Gobierno español.

Su homólogo portugués ensalzó esa apuesta de futuro conjunta y agradeció a Zapatero que propusiese que el laboratorio se construyeses en una ciudad portuguesa.

El centro tendrá un presupuesto anual de 30 millones de euros, estará a pleno rendimiento en 2011 y en él trabajarán 200 investigadores.

Si este laboratorio fue considerado como un ejemplo palpable de la excelente relación bilateral, otro es, según ambas delegaciones, la constitución formal del Consejo de Seguridad y Defensa hispano-luso.

El Consejo (iniciativa que ya tiene precedente entre España y Francia) está formado por responsables militares y de los ministerios de Defensa y Asuntos Exteriores de los dos países.

Luis Amado, ministro de exteriores portugués, informó de que entre sus primeros temas de consulta estarán las misiones militares internacionales en las que participan los dos países y el análisis de los teatros de crisis y conflictos, como Afganistán, Líbano o Kosovo.

El terrorismo estará también en la agenda de trabajo como fenómeno que afecta directamente a la seguridad y la defensa a nivel global, según Amado, quien recordó la suspensión este mes del rally Lisboa-Dakar por la incertidumbre a su paso por Mauritania.

Pero consideró que lo referente a la organización terrorista ETA (cuya posible actuación en Portugal investigan equipos mixtos policiales y judiciales hispano-lusos) se encuadra en la cooperación entre los ministerios de Interior y fuerzas de seguridad de los dos países.

La primera jornada de la cumbre fue el escenario de la firma de otros acuerdos bilaterales sobre cooperación, electricidad, trabajo, ciencia e industria automovilística.

En materia de energía los dos gobiernos suscribieron un acuerdo sobre el Mercado Ibérico de Electricidad (MIBEL), aprobado en noviembre de 2003, para facilitar su puesta en marcha a través de una armonización de las regulaciones del sector de los dos países.

El ministro español de Industria, Joan Clos, consideró que las nuevas subastas de capacidad establecidas en ese acuerdo supondrán un "fomento de la liquidez y la competencia en el mercado eléctrico".

El memorándum de cooperación en materia laboral y de asuntos sociales, firmado por el ministro de Trabajo español, Jesús Caldera, y el portugués, José Antonio Vieira da Silva, tiene entre sus objetivos promover iniciativas relativas al derecho del trabajo y a la reforma de las relaciones laborales con encuentros bilaterales entre agentes sociales y expertos de los dos países.

En el área de la industria automovilística se suscribió un protocolo de colaboración entre el Centro para la Excelencia e Innovación de la Industria Automovilística de Portugal y el Centro Tecnológico de Automoción de Galicia para desarrollar soluciones "sostenibles" en el sector.