Esperan completar un trasvase "muy controlado" de agua entre presas en México

México.-  La Comisión Nacional del Agua (Conagua) de México espera hoy completar "un trasvase muy controlado" de agua entre las presas de Malpaso, que dure más de ocho horas entre el cauce alto del río Grijalva y la de Peñitas, informaron fuentes oficiales.

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(EFE)

En la presa Peñitas, del estado mexicano de Chiapas, comenzó el desfogue de millones de metros cúbicos de agua acumulada en las presas de Chiapas que amenazan al vecino estado de Tabasco.

La operación comenzará a las 10.00 hora local (17.00 GMT) y consistirá en la retirada de un tapón natural causado por un derrumbe ocurrido el pasado 4 de noviembre en la localidad de Juan de Grijalva, en el sureño estado mexicano de Chiapas.

"Lo que preocupa a los topógrafos, a los geólogos, es que haya deslizamientos de tierra", explicó esta mañana en la zona a la emisora W-Radio el director general de la Conagua, José Luis Luege.

Durante los últimos 44 días fueron retirados en la zona 1,1 millones de metros cúbicos de tierra, piedras y lodo en una magna operación de ingeniería en la que trabajaron 700 personas día y noche en turnos de doce horas.

La operación final prevista para hoy consistirá en la retirada de un último talud de tierra que abra paso a las aguas hacia el canal con maquinaria.

También está prevista la apertura de las compuertas de la presa de Malpaso, ubicada 40 kilómetros al norte del tapón, y la liberación del agua a 130 metros cúbicos por segundo en un primer momento por el canal hacia la presa de Peñitas, que a su vez verterá en las próximas horas sus aguas hacia zonas más bajas en el estado de Tabasco.

El fondo del canal de 800 metros de longitud, 100 de ancho y 120 de altura formado entre los dos extremos del tapón se encuentra a 92 metros sobre el nivel del mar.

El desfogue gradual del agua va a estar muy controlado desde las presas para prevenir inundaciones en Chiapas y en el vecino estado de Tabasco, donde el Grijalva vierte su cauce en los ríos Samaría y Carrizal, que rodean la ciudad de Villahermosa, inundada hace un mes, indicó Luege.

El Ejército y personal de la Marina han evacuado en la zona cercana a los márgenes del Grijalva a más de 10.000 personas en 25 comunidades localizadas a lo largo del cauce para evitar que las posibles crecidas del río se cobren la vida de los residentes.

"Nadie puede asegurarnos al cien por ciento que los materiales (sueltos) puedan ser arrastrados y provocar deslizamientos adicionales", indicó hoy Luege, quien considera que lo más peligroso de la operación son posibles nuevos corrimientos de tierras.

El titular de la Conagua señaló que la obra "de muy alto nivel técnico" que se ha realizado en la zona para liberar las aguas y reabrir el cauce del Grijalva ha costado unos 1.000 millones de pesos (91 millones de dólares).

La fase final de esta operación mantiene en alerta a los responsables de Protección Civil de Chiapas, Tabasco y a las autoridades federales.

"Hoy estamos casi seguros de que no habrá problemas. Sin embargo, el que haya niveles de contingencia en los planes de protección civil es correcto", indicó Luege.

El alto funcionario calcula que las aguas liberadas en las próximas horas tarden "entre ocho y diez" más en llegar a Villahermosa antes de seguir rumbo al Golfo de México y ser vertidas al mar.