Haití espera la rápida confirmación por parte del Parlamento del nuevo primer ministro

Puerto Príncipe.-  El presidente de Haití, René Préval, actuó con rapidez desde el Gobierno con su nominación de un nuevo primer ministro que deberá ser ratificado por el Parlamento (bicameral), luego de que el Senado destituyera el viernes a la economista Michèle Pierre-Louis.

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(EFE)

En la imagen, el presidente de Haití, René Préval. EFE/Archivo

El primer ministro designado, Jean Max Bellerive, no ha formulado, hasta ahora, declaraciones públicas.

Sin embargo, Bellerive, quien ejercía como ministro de Planificación del gabinete de Pierre-Louis, deberá presentar pronto sus documentos a las dos cámaras legislativas y pensar ya en su plan de Gobierno y en la conformación de sus ministros.

Mientras la comunidad internacional manifiesta que se debe instalar rápidamente un nuevo Gobierno en Haití.

"La mayor inquietud de la comunidad internacional sería constatar un vacío en sus relaciones con Haití después de la salida del Gobierno de Pierre-Louis", reconoció el presidente de la Cámara de Diputados, Levaillant Louis Jeune, en declaraciones recientes a periodistas.

"Nos comprometemos para que en el menor plazo posible creemos las estructuras para encaminar las ratificación del primer ministro designado", agregó.

Las cámaras deben establecer dos comisiones especiales para recibir y analizar los documentos de Bellerive, con el fin de verificar que su perfil respeta los prescritos en la Constitución de Haití.

Los documentos del primer ministro designado deberán ser conocidos primero en el Senado y luego en la Cámara de Diputados, según acordaron los presidentes de ambos hemiciclos.

El presidente de los diputados haitianos ve en Bellerive un buen recurso para liderar al nuevo Gobierno, al considerar que el designado tiene una "larga experiencia en la administración pública y una actitud de trabajo con los legisladores".

Louis Jeune indicó también que Bellerive "domina los asuntos de cooperación", los que, según él, favorecen las relaciones de Haití con la comunidad internacional.

Por su parte, el presidente del Senado, Kelly Bastien, invitó al primer ministro designado a tomar en cuenta las experiencias pasadas para no repetir los mismos errores.

"Debe sacar lecciones de las causas de los fracasos de las Administraciones precedentes", declaró.

Bastien deseó que Bellerive se muestre "atento a las preocupaciones" que van a expresar los legisladores sobre la gestión del Gobierno y los problemas que enfrenta el país.

"Hay que establecer una perspectiva a mediano y a largo plazo para realizar actos que permitan cambiar realmente el país", agregó.

Jean Max Bellerive nació en 1958 en Puerto Príncipe y es licenciado en ciencias políticas y relaciones internacionales.

Hijo de un médico quien fuera alto funcionario de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Bellerive dejó Haití a muy corta edad y realizó sus estudios primarios, secundarios y universitarios en Suiza, Francia y Bélgica.

Regresó al país en 1986, poco antes de la caída del ex dictador Jean-Claude Duvalier.

En 1988, entró en el Ministerio de Interior y Colectividades Territoriales como ayudante jefe de servicio y pasó a ser el director general.

Hizo un breve paso al Consejo Electoral Provisional (CEP) entre 1999 y 2000. Ocupó las funciones de presidente de la Mesa electoral del Oeste que integra la capital, Puerto Príncipe.

Entre 2000 y 2006, Bellerive fue jefe de Gabinete del Primer Ministro, Jean-Marie Cherestal, luego se desempeñó como consejero técnico principal del primer ministro Yvon Neptune.

Durante ese mismo período fue también coordinador de la Célula de Coordinación y Seguimiento de las Políticas Públicas (CCS), financiado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y trabajó con el gabinete del primer ministro Gérard Latortue.

Desde 2006 ocupa la función de ministro de Planificación y Cooperación Externa, cargo que lo llevó a trabajar estrechamente con los sectores de la cooperación internacional.

En sus últimas declaraciones, hace dos semanas, Jean Max Bellerive planteó la necesidad de "un sistema nacional de gestión de los proyectos" financiados por proveedores de fondos.

"Es el momento de asegurar el seguimiento, evaluar, corregir o suspender algunos proyectos que presentan obstáculos o que no llegan a rendir los resultados esperados", declaró en esa oportunidad.