ARENA se enfrenta al fantasma de la fractura siete meses después de la derrota

San Salvador.-  La Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), el partido que gobernó El Salvador durante los últimos 20 años, se enfrenta al fantasma de la fractura interna siete meses después de su derrota en los comicios de marzo ante el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN).

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(EFE)

Los legisladores expresaron su malestar al no ser tomados en cuenta para integrar el Consejo Ejecutivo Nacional, que encabeza el ex presidente Alfredo Cristiani (1989-1994), quien, de inmediato, convocó a un diálogo con los disidentes. EFE/Archivo

El pasado lunes, un día después de celebrar su 28 asamblea ordinaria, 12 de los 32 diputados de ARENA se declararon en rebeldía y amenazaron con votar de forma "diferenciada", en una amenaza a la unidad en el Parlamento.

Los legisladores expresaron su malestar al no ser tomados en cuenta para integrar el Consejo Ejecutivo Nacional (Coena), que encabeza el ex presidente Alfredo Cristiani (1989-1994), quien, de inmediato, convocó a un diálogo con los disidentes.

"En el peor de los escenarios, esta situación puede llevar a un rompimiento de la correlación de fuerzas en la Asamblea Legislativa", declaró hoy a Efe el analista Juan Héctor Vidal.

La decisión de los diputados rebeldes amenaza con romper el bloque conformado por ARENA para plantar cara ante al gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), que este año pasó a ser la principal fuerza en el Parlamento, con 35 escaños aunque sin mayoría en la cámara.

De conseguir el respaldo de los 12 diputados, el FMLN sumaría 47 votos, lo que le aseguraría la mayoría absoluta (43).

Sin embargo, Vidal considera que este camino "tampoco va a ser fácil", pues los diputados han insistido en que pertenecen a ARENA.

"El FMLN debe estar contentísimo con lo que está pasando", sostuvo el experto, que sin embargo no descartó que, al final, las directivas de ARENA les den unas "nalgaditas" a los disidentes y los hagan volver al redil o que éstos, en otro caso, se constituyan en un nuevo partido.

El partido de Gobierno requiere, sin embargo, de mayoría calificada (56 votos) para aprobar asuntos claves como el presupuesto de 2010 o los préstamos internacionales requeridos por el presidente salvadoreño, Mauricio Funes.

Pero la rebeldía de los diputados también amenaza con dar al traste con una de las consignas aprobadas por ARENA en la asamblea del domingo, de recuperar terreno con miras a las elecciones legislativas y municipales de 2012, para encaminarse a las presidenciales de 2014.

"Representamos once departamentos en este momento. En términos de votos son más de 800.000 los que esta fracción llevó a ARENA, por lo tanto creíamos que teníamos derecho a un espacio en el Coena", argumentó el legislador Nelson Guardado, al recordar su aporte al partido.

Una escisión, anticipada por algunos analistas, pondría en aprietos a esta fuerza política para enfrentar al FMLN, la ex guerrilla que llegó al poder de la mano de Funes.

"Dentro de dos años estaremos en vísperas de las próximas elecciones legislativas y municipales, que para todos los partidos, y en especial para ARENA, serán una prueba decisiva", advirtió en uno de sus editoriales el diario La Prensa Gráfica.

Este diario consideró que ARENA "no ha sabido, hasta la fecha, procesar las causas de la derrota electoral y por consecuencia no le ha sido posible prepararse para encarar los efectos de su nueva responsabilidad dentro de la actual correlación de fuerzas".

En el mismo sentido se expresó Vidal, quien indicó que "las fisuras no van a desaparecer y quedará en la imagen de la población que a ARENA le están costando muchísimo los cambios después de la derrota electoral".

Aunque no salió humo blanco del encuentro de emergencia que Cristiani sostuvo el lunes con los disidentes, las partes han anunciado que se volverán a reunir.

Mientras, el jefe de la fracción del FMLN en el Parlamento, Medardo González, ha dicho que si los 12 diputados logran crear un nuevo grupo parlamentario buscarán "entrar en contacto de manera inmediata".

Consultado por los periodistas, el presidente Funes declinó referirse al tema, al declararse respetuoso de la institucionalidad de ARENA, aunque hizo votos para que resuelvan sus problemas, pues, según él, se necesita "una oposición fortalecida".