Calvo asegura que dar la píldora postcoital sin receta es un "error médico"

Madrid.-  El delegado madrileño de Seguridad y Movilidad, Pedro Calvo, responsable del Ayuntamiento de la capital en materia de Salud Pública, considera que la libre dispensación de la píldora postcoital en farmacia sin prescripción médica, que comienza mañana, sólo puede ser considerada como un "error médico".

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(EFE)

El delegado madrileño de Seguridad y Movilidad, Pedro Calvo, responsable del Ayuntamiento de la capital en materia de Salud Pública, considera que la libre dispensación de la píldora postcoital en farmacia sin prescripción médica, que comienza mañana, sólo puede ser considerada como un "error médico". EFE/Archivo

En un artículo publicado hoy en el diario ABC con el título "Postcoital sin receta: error médico", Calvo critica que la píldora también llamada "del día después" pueda ser dispensada en farmacias "con el mismo tratamiento legal que una aspirina" y advierte de que el Ayuntamiento de Madrid "mantiene su criterio de requerir la participación médica y no dispensará la píldora en sus centros sin un dictamen previo".

Tras recordar que "el Ayuntamiento de Madrid fue pionero hace cinco años en la dispensación gratuita, tras revisión médica, de la medicación postcoital en los servicios de salud municipales", el delegado aborda los "riesgos" de la venta sin receta, el primero de ellos la "banalización del medicamento: hacer lo excepcional cotidiano".

"¿Quién pone freno a su uso como método anticonceptivo habitual?, ¿dónde está el límite?", se pregunta.

El segundo riesgo son "las posibles consecuencias para la salud derivadas de su ingesta", ya que en el prospecto del medicamento se indica que «no está recomendado en pacientes con riesgo de sufrir un embarazo ectópico (aquel que se desarrolla fuera del útero) o con antecedentes de salpingitis (inflamación de las trompas de Falopio)».

En el prospecto también se advierte de que no se tome si se tiene alergia conocida al levonorgestrel, o a cualquiera de los excipientes; y que se tenga especial cuidado en función de los antecedentes médicos.

Asimismo, el laboratorio no recomienda su uso en niñas «ya que los datos disponibles en menores de 16 años son muy limitados».

"La tercera derivada -escribe Calvo- es la humana ¿Qué papel nos queda a los padres en todo esto?, ¿y a los profesionales de la medicina?", puesto que "se pueden dar las situaciones absurdas de tener que firmar una autorización para que nuestros hijos vayan de excursión con el colegio, pero no para que en una farmacia les dispensen sin más la píldora postcoital".

El responsable de Salud Pública del Gobierno municipal de Alberto Ruiz-Gallardón dice también que el Ministerio de Sanidad deberá justificar "por qué se realiza una discriminación económica en la dispensación de la píldora postcoital y no se incluye, tal y como ha solicitado el Ayuntamiento de Madrid, en la lista de medicamentos financiados por la Seguridad Social".

Afirma en este sentido que "con el planteamiento actual -se venderá al precio de 20 euros- sólo estará disponible para las mujeres que tengan el dinero para comprarlo, independientemente de sus necesidades".

Calvo considera que "lo malo de hacer demagogia con la salud pública es que nunca se puede predecir el alcance de las resoluciones, ni parece ético trasladar a una persona de 16 años o menos la responsabilidad de una decisión adoptada en despachos".

"¿Qué madurez queda en entredicho con esta medida, la de las menores o la de la política social y sanitaria de un gobierno sin criterio con medidas incoherentes y contradictorias?".