Rodrigo García clausura San Sebastián con Watts como centro de su universo

San Sebastián (España).-  El director colombiano Rodrigo García reincide en el universo femenino con "Mother and Child", una película que clausuró hoy el Festival de Cine de San Sebastián y protagonizada por una actriz con experiencia en realizadores latinos Naomi Watts.

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(EFE)

El cineasta colombiano Rodrigo García y los actores Naomi Watts, Kerry Washington y Jimmy Smits (i-d) hoy en el Festival de San Sebastián, donde han presentado su trabajo, "Mother and Child", en la Sección Oficial, pero fuera de concurso, con la que se cierra el certamen.

El realizador colombiano da con "Mother and Child" un paso más hacia la difícil labor de desetiquetarse como "hijo de Gabriel García Márquez", y tras una carrera avalada por películas como "Things You Can Tell Just by Looking at Her" o series de televisión de éxito como "In Treatment".

De nuevo, apuesta por trenzar historias: la de Karen, una mujer que cedió a su hijo en adopción a los 14 años, la de Elizabeth, su hija emocionalmente bloqueada, y la de Lucy, una mujer negra empecinada en adoptar un bebé.

"Son mujeres que tienen algo en común: tienen caracteres muy fuertes y son muy controladoras, pero no les empieza a ir bien hasta que pierden el control", explica García, quien no descarta rodar en Colombia, pero pone sus condiciones.

"Me encantaría hacer un proyecto en mi país", reconoció en rueda de prensa, "pero hay sobre mí demasiadas expectativas. Todo el mundo va a estar pendiente de si va a tener o no relación con los libros de mi padre y eso no me gusta, porque ésa sería la noticia y no la propia película", explicó.

"Mother and Child" fue recibida con aplausos durante el pase para periodistas acreditados, para los que los diálogos dinámicos, el sentido del humor y el lenguaje directo de la película fue un verdadero bálsamo después de ocho días de cine denso y dramático.

Producida por el mexicano Alejandro González Iñárritu, fue él quien hizo llegar a Naomi Watts -con la que había trabajado en "21 Grams"- un guión que, según la actriz, contenía "tres personajes femeninos maravillosos. Y, además, estaba escrito por Rodrigo, al que siempre había admirado", aseguró.

Aunque en un principio quiso interpretar a Karen, papel que recayó en Annette Bening, García le había reservado el de Elizabeth, su hija, quien canaliza el desarraigo con agresividad sexual.

"¿De verdad creéis que siempre he hecho papeles dulces y ahora interpreto a una zorra?", preguntó. "Teníamos muy claro Rodrigo y yo que no queríamos que Elizabeth fuera una villana. El problema es que tiene una necesidad desesperada de exponer el dolor de las personas para compensar el suyo propio".

García contó, además, con un conocido rostro latino para darle la réplica masculina a Bening: Jimmy Smits, conocido por series como "L.A. Law" o "The West Wing".

Según él, los personajes femeninos de la cinta "son como pájaros a los que se les rompieron las alas en un momento de su vida", pero alabó también la habilidad de García para retratar a los hombres.

"Siempre me han gustado, interesado, sorprendido las mujeres. Pero conforme me voy haciendo mayor, me van gustando más los hombres. Esos hombres cuarentones que se niegan a crecer", explicó García.

El realizador, que siempre ha destacado por su sensibilidad para abordar el error humano, evita simplificar la cuestión de la adopción. "Hay muchas emociones implicadas en ella y quería retratar la posibilidad de cambiar de opinión continuamente al respecto".

"Mother and Child", pese a que en la segunda parte del relato llega a terrenos fronterizos con el melodrama, demuestra con frases como "siempre digo la verdad porque es más fácil de recordar" o "¿por qué nadie dice nunca que la adopción no es natural?" que García sabe dar en la diana de lo humano sin florituras.

Pero pese a todo, algunos apuntaron cierta proximidad de su visión sobre la adopción con el conservadurismo pro-vida. "Si lo que me preguntan es si soy seguidor de Su Santidad el Papa, le diré que no particularmente", zanjó.

En cualquier caso, sin las presiones del concurso, la película cumplió sobradamente su función: la de dejar un buen sabor de boca cinematográfico en una edición, la número 57, cuyo palmarés se anunciará a lo largo de la jornada y donde quince películas de disputan la Concha de Oro.

Mateo Sancho Cardiel