Griñán reprocha a Arenas la "cantinela" de reformas profundas y bajada fiscal

Sevilla.-  El presidente andaluz, José Antonio Griñán, ha dicho hoy sobre el pacto para lograr una rebaja del gasto corriente en los próximos presupuestos ofrecido por el líder del PP-A, Javier Arenas, que deje la "cantinela" de que las reformas profundas y la bajada de impuestos son la solución a la crisis.

En respuesta a una pregunta oral en el Parlamento formulada por Arenas sobre políticas de la Junta que inciden en el mercado de trabajo, Griñán le ha advertido de que él está dispuesto a debatir sobre ingresos y gastos, pero que el PP está equivocado si cree que utilizando la "cantinela" de las reformas profundas y la bajada de impuestos va a ser la solución a la crisis económica.

Javier Arenas ha propuesto que "sin tocar un euro" en educación, sanidad y servicios sociales se alcance un pacto para recortar el gasto corriente, por lo que se ha mostrado dispuesto a un acuerdo presupuestario "en beneficio de los parados y los creadores de empleo".

Ante la acusación de Javier Arenas de que el Gobierno andaluz "tiene pavor" a las reformas para salir de la crisis, el presidente de la Junta ha recordado que la política que aplica es la misma que en la pasada legislatura propició 600.000 empleos y que se crearan 500.000 empresas.

"Y todo ello lo hacemos en concertación social con sindicatos y los empresarios. El sexto acuerdo se evaluó hace meses, con 93 actuaciones sobre el mercado trabajo que repercutieron en el crecimiento económico y del empleo", ha subrayado Griñán, quien ha pedido a Arenas que cuando hable de la crisis "diga la verdad".

Ha reiterado que la Junta sigue tomando medidas y "adaptando" las que ya se han tomado con anterioridad y se ha mostrado seguro de que de la misma forma que se salió de la crisis de los 90 junto a los agentes sociales y económicos lo mismo va a ocurrir con la actual.

Por su parte, Arenas ha comenzado su intervención reprochando que "algunos" dirigentes socialistas critiquen a los "creadores de empleo", y ha advertido de que para generar más o menos empleo en un país o una comunidad "no es indiferente" que se suban o bajen los impuestos o haya una determinada formación de los empleados.

"Y eso son responsabilidades directas del Gobierno", ha apuntado el líder del PP, quien tras asegurar que Andalucía es la comunidad autónoma en la que se pagan más impuestos, ha llamado la atención de su "incoherencia" por apoyar la subida de impuestos por parte del Gobierno mientras que anuncia que no lo hará en Andalucía.

"Usted no quiere subir los impuesto pero le parece bien que (José Luis Rodríguez) Zapatero sí los suba cuando somos los mismos andaluces los afectados", ha subrayado Arenas, quien ha lamentado que desde el PSOE "un día se diga que bajar los impuestos es de izquierdas y, al día siguiente, lo contrario".

Arenas, que ha reclamado al Gobierno andaluz una explicación a "su pésima gestión", ha recordado datos como que la licitación de la obra pública haya caído un 30 por ciento en seis meses o que el Gobierno de Zapatero haya dejado de invertir 800 millones en los últimos dos años en la comunidad andaluza.

En su opinión, los problemas estructurales siguen pendientes porque el presidente de la Junta "le tiene pavor a las reformas", y ha advertido de que por mucha concertación social que se haga "sin reformas no solucionarán los problemas estructurales", y que plantearse la concertación sobre más impuestos es un "disparate".

En este sentido, Griñán ha señalado que de la misma forma que el Gobierno de España va a subir los impuestos va a destinar 7.800 millones de euros para los desempleados andaluces, una medida que, según ha dicho, apoya "incondicionalmente", y ha reconocido que su Gobierno no subirá la presión fiscal porque no tiene rentabilidad económica ni financiera.

Ha criticado a Arenas que ofrezca un pacto "antisocialista" mientras que la Junta ofrece un pacto por el empleo, y le ha pedido que "no escurra el bulto" en lo relativo a las reformas porque al final las propuestas de austeridad del PP se han traducido en la supresión de la gratuidad de los libros de texto y las inversiones hospitalarias, como ha ocurrido, ha dicho, en Galicia.