El OIEA tiene un nuevo director general, cuyo principal desafío será Irán

Viena.-  El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) cuenta desde hoy con un nuevo director general, el japonés Yukiya Amano, quien liderará la agencia nuclear de Naciones Unidas a partir de diciembre próximo y cuyo principal desafío será la investigación del programa atómico de Irán.

Amano fue confirmado en el cargo por consenso entre los 150 países miembros de la Conferencia General de la OIEA, que celebra esta semana en Viena su 53 reunión anual.

Debido a que no asume su cargo oficialmente hasta diciembre (el mandato de su antecesor, Mohamed El Baradei, vence el 30 de noviembre), Amano rechazó hoy dar su opinión sobre el conflicto nuclear con Irán.

Se limitó a destacar la importancia del diálogo para resolver el conflicto. "Espero que haya un buen marco para el diálogo con Irán", dijo sobre las conversaciones que la comunidad internacional iniciará con Irán el próximo 1 de octubre.

El conflicto nuclear con la República Islámica será, con toda probabilidad, el principal asunto que ocupe, al menos, la primera parte de su mandato de cuatro años.

El diplomático japonés sustituirá en el cargo al egipcio El Baradei, premio Nobel de la Paz 2005 y principal responsable de poner a esta agencia técnica de la ONU sobre el mapa de las relaciones geopolíticas internacionales.

Amano manifestó en rueda de prensa, al margen de la Conferencia General, que el OIEA "puede tratar asuntos globales", sean políticos, energéticos y de sanidad, y opinó que, para ello, el OIEA "debe ser imparcial, profesional y confiable".

El japonés, de 62 años, agregó que el mundo se enfrenta a "un creciente riesgo de proliferación y terrorismo nuclear, además de una creciente demanda energética, junto con la preocupación sobre crecientes emisiones de gases contaminantes" que causan el efecto invernadero.

"Estos desafíos son asuntos globales y el organismo tiene la habilidad y responsabilidad de enfrentarlos con el uso de energía nuclear", aseveró el director general electo.

Por su parte, El Baradei destacó hoy, en su último discurso ante la Conferencia General del OIEA, que sólo el diálogo puede aportar la solución al conflicto iraní y pidió más poderes para el organismo para prevenir la proliferación nuclear.

Así, se dejaría de depender de sanciones que no suelen funcionar y afectan sólo "a los más vulnerables y a los inocentes", dijo.

Haciendo un repaso de sus doce años al frente del organismo, El Baradei lamentó que, "pese a que el Organismo y la ONU facilitaron información imparcial y fáctica que señalaba la ausencia de armas de destrucción masiva en Irak, se lanzó una guerra contra ese país".

"Importantes lecciones tienen que ser aprendidas de Irak y de Corea del Norte", dijo el director general saliente. "La diplomacia y una verificación exhaustiva deben seguir su curso, sin importar lo largo y pesado que sea el proceso", afirmó.

El expediente iraní lleva ya seis años abierto y aún quedan pendientes "varias cuestiones y acusaciones que arrojan dudas sobre la naturaleza pacífica de ese programa", agregó El Baradei.

Unas dudas que sólo podrán ser esclarecidas con la colaboración de Teherán y la "creación de confianza" a través del diálogo, dijo.

Irán, por su parte, se mostró hoy dispuesto a dialogar sobre su programa nuclear, pero rechazó condiciones previas y amenazas militares en su contra.

El nuevo vicepresidente y responsable máximo del programa nuclear de Irán, Aliakbar Salehi, insistió ante el pleno de la conferencia que su Gobierno colaborará con el OIEA y seguirá permitiendo inspecciones de sus instalaciones nucleares.

A su vez, criticó la "arrogancia" de quienes pretenden que Irán renuncie a su "legítimo derecho" a usar la energía nuclear.

"Más aún, estamos siendo continuamente amenazados con ataques contra nuestras instalaciones nucleares", denunció Salehi en referencia a Israel y Estados Unidos.