El concierto de tributo a Michael Jackson en Viena naufraga entre críticas

Viena.-  Sin grandes estrellas y con las críticas subiendo decibelios, el concierto homenaje a Michael Jackson en Viena naufragó víctima de las improvisaciones y ha sido trasladado a Londres, donde se celebrará en junio de 2010.

El concierto previsto para el 26 de septiembre ha aguantado sólo tres días, después de conocerse el cartel, en el que para decepción general no estaba ni Madonna, ni U2, sino Mary J. Blige, Akon, Natalie Cole y Chris Brown, entre otros.

El panorama se enturbió aún más cuando se supo que Mary J. Blige, Chris Brown y Natalie Cole no terminaban de confirmar su presencia.

La decepción entre muchos de los asistentes que habían comprado hasta 40.000 entradas, según distintas versiones, era obvia, habían pagado entre 63 y 518 euros por ver a figuras de primera fila.

"Muchos artistas e intérpretes con los que he hablado personalmente me dijeron que sería un gran honor formar parte de ese concierto conmemorativo para mi hermano fallecido. Sin embargo, debido a lo ajustado de las fechas, no era posible para muchos de ellos cambiar su agenda para poder estar sobre el escenario en Viena", explicó Jermaine Jackson.

El hermano mayor de Michael cargó contra la prensa por haberse mostrado crítica con la talla de los artistas que iban a participar en el homenaje musical y describir como "farsa" el concierto previsto al aire libre en los jardines del palacio de Schönbrunn.

"No soy capaz de entender que artistas que han ganado ocho premios Grammy, vendido millones de discos en todo el mundo y que son capaces de llenar grandes estadios sean definidos como artistas de segunda fila, y que se burlen de ellos y les falten al respeto", se lamentó Jermaine.

"Si estos artistas no son bienvenidos en Viena, Londres estará encantada de acogerlos", agregó el hermano del "rey del pop" sobre el traslado del concierto a Londres en junio de 2010.

Los promotores devolverán el dinero de las entradas vendidas por internet y negocian que el concierto se celebre en el estadio de Wembley, "justo antes de lo que será el primer aniversario de la muerte de Michael", según Georg Kindel, el impulsor del evento.

Aunque fuera de forma indirecta, Jermaine reconoció que el tributo a su hermano en Viena no se había preparado de la mejor manera.

"Pero debemos hacerlo bien. Queremos (contratar) las estrellas y para ello hemos aplazado (el concierto). Queremos hacerlo al mismo nivel al que él lo hubiera hecho", dijo el cantante a la prensa.

La venta de entradas para el concierto de Londres comenzará a primeros de diciembre, después de que se anuncien las primera estrellas que actuarán y no antes, como fue el caso en Viena.

El homenaje se celebra así en la ciudad donde el autor de "Bad" tenía previsto la serie de conciertos "This is it" antes de su muerte.

Se espera que en el homenaje póstumo participen los músicos y los bailarines que iban a estar en esa serie de conciertos, y que se interpreten muchos de sus temas, ya clásicos del pop.

Uno de los momentos más esperados será el dueto virtual que Jermaine formará con su hermano fallecido, cuya imagen se proyectará sobre una pantalla gigante.

La celebración del concierto homenaje a Michael Jackson cobró incluso una dimensión política en Austria, ya que el Ayuntamiento de Viena había prometido aportar 600.000 euros a la organización del recital.

La oposición criticó con dureza al Gobierno socialdemócrata de la capital por el desembolso de dinero público para un concierto que no se perfilaba como de primer categoría.

El Ayuntamiento retiró, pocas horas antes de anunciarse la suspensión del concierto, su promesa de financiar el evento, del que se esperaba un impulso para su imagen internacional.