Los sindicatos denuncian que faltan entre 1.500 y 2.000 docentes en las aulas

Barcelona.-  Los sindicatos de docentes han denunciado hoy que el curso escolar arrancará el próximo 14 de septiembre con un déficit de entre 1.500 y 2.000 profesionales debido a los "recortes" que aseguran ha aplicado el departamento de Educación como medida de ahorro para combatir la crisis.

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(EFE)

Los sindicatos de docentes han denunciado hoy que el curso escolar arrancará el próximo 14 de septiembre con un déficit de entre 1.500 y 2.000 profesionales debido a los "recortes". EFE/Archivo

Tanto la central mayoritaria USTEC-STEs como los otros grandes sindicatos del sector, CCOO y UGT, han coincidido en advertir de que la "congelación de plantillas" afectará a la calidad de la educación porque hará difícil, por ejemplo, desdoblar grupos, aplicar programas de innovación y atender mejor en general a los alumnos a los que les cuesta más seguir las clases.

USTEC y CCOO han cifrado hoy en entre 1.500 y 2.000 los docentes que faltarán de las aulas de la educación obligatoria para mantener las condiciones del curso pasado y atender a los 24.000 nuevos alumnos con los que crece el sistema, cuando Educación sólo ha incrementado la plantilla total en 170 profesionales.

El conseller de Educación, Ernest Maragall, ha rechazado hoy, en declaraciones a Catalunya Ràdio recogidas por Efe, que se haya llevado a cabo algún "recorte" y ha asegurado que las plantillas, que "se han mantenido", podrán atender todas las necesidades del alumnado.

Rosa Cañadell, portavoz de USTEC, ha asegurado que, como media, se puede considerar que en cada centro de primaria faltarán entre 0,5 y 1,5 maestro, número que puede llegar a cuatro en los institutos de secundaria.

"Con este recorte, el departamento ha cargado a los docentes que están en los centros con mucho más trabajo. Algunos institutos han recibido incluso instrucciones orales de que incrementen las ratios hasta los 37 alumnos por aula -cuando el límite son 30-", ha señalado Montse Ros, de CCOO.

Los dos sindicatos han coincidido también en criticar cómo el departamento que dirige Ernest Maragall prevé poner en marcha el plan de digitalización de las aulas que empezará a aplicarse el próximo curso en XX centros de secundaria y algunos de primaria.

"El ordenador es una buena herramienta, pero la medida es precipitada y se ha estudiado poco. Además, digitalizar las aulas vale mucho dinero y creemos que los prioritario es contar con más profesionales y más atención a la diversidad", ha dicho Cañadell.

USTEC, que ha destacado en los últimos cursos por sus fuertes críticas a la política del departamento de Educación, que le han llevado a organizar varias huelgas de docentes, ha convocado ya una primera protesta el lunes ante la sede de la consellería en contra de los nombramientos telemáticos que se han llevado a cabo este año.

Por su parte, Montse Ros ha asegurado que la digitalización de las aulas "no es una mala idea, pero se ha hecho muy mal. Los centros educativos que participan en el proyecto han ido recibiendo durante el verano órdenes y contra-órdenes sobre cómo debían ser éstos y ahora resulta que tienen que tener diez pulgadas, ser de una marca concreta y gestionados por La Caixa".

La responsable de enseñanza de CCOO se ha preguntado también si alguien del departamento se ha parado a analizar los efectos para la salud ocular de los alumnos que se pasen cinco horas al día frente a un ordenador. "Los fabricantes de gafas deben estar felices", ha ironizado.

Todos los sindicatos han denunciado también los déficit del sistema telemático de nombramiento de profesores, que se ha aplicado este año al cien por cien y que, según Comisiones, ha provocado que el 20% de los centros no dispongan aún de toda la plantilla cuando faltan tres días -y festivos- para el inicio del curso.

Dada esta situación, Ros se ha preguntado: "¿Cómo espera el departamento cambiar el calendario escolar el año que viene (lo que supone adelantarlo una semana) si no puede tener la maquinaria administrativa preparada para que todos los profesores estén en sus escuelas el 1 de septiembre para preparar el curso?".

CCOO y UGT han acusado también a la Generalitat de "despedir" a profesores de educación especial que impartían clases en centros especiales -que van perdiendo aulas para permitir que sus alumnos se escolaricen en escuelas ordinarias- sin que sean recolocados para aprovechar su experiencia.