Los partidos vascos condenan la "batalla campal" creada en Lekeitio por radicales

Bilbao.-  Los partidos políticos vascos han condenado hoy la "batalla campal" que durante cinco horas creó un "infierno" en Lekeitio (Vizcaya) por las acciones de decenas de encapuchados que se enfrentaron a la Ertzaintza e incendiaron dos automóviles y numerosos contenedores.

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(EFE)

Dos de los vehículos calcinados por las personas que esta madrugada se enfrentaron con la Ertzaintza en Lekeitio, con un balance de varios heridos, entre ellos un agente del cuerpo, y ocho detenidos.

Según informaron el ayuntamiento de Lekeitio y el departamento de Interior, los incidentes comenzaron hacia la medianoche cuando un grupo de radicales se concentró frente a la subcomisaria de la Ertzaintza, en la avenida Pascual Abaroa, y comenzaron a increpar e insultar a los ertzainas, a quienes lanzaron además piedras, botellas y otros objetos.

Los agentes tuvieron que realizar varias cargas para dispersar a los alborotadores, quienes cruzaron e incendiaron contenedores en el centro de la ciudad.

Los incidentes duraron cinco horas y los vándalos incendiaron dos automóviles, numerosos contenedores en el centro del pueblo y en el puerto, rompieron lunas de coches, comercios y bancos y causaron desperfectos en las terrazas de varios bares y restaurantes.

Además, intentaron atacar, por segunda vez en menos de un mes, el "batzoki", la sede social del PNV, y agredieron a algún transeúnte.

Durante los altercados, la Ertzaintza detuvo a ocho presuntos alborotadores, que a media tarde permanecían en dependencias policiales a la espera de pasar a disposición judicial, y siete personas resultaron heridas, una de ellas un ertzaina que recibió un botellazo en la cabeza.

Estos altercados se produjeron en el día grande de las fiestas de San Antolín en Lekeitio, localidad pesquera y turística de 7.500 habitantes, que ayer celebró su tradicional "Antzar eguna" (Día de gansos).

Todos los partidos parlamentarios vascos condenaron los incidentes, cuya responsabilidad atribuyeron a la izquierda abertzale, aunque los nacionalistas los vincularon con el clima de tensión habido durante las fiestas del verano por la retirada de fotos de presos de ETA y la prohibición de manifestaciones de la izquierda abertzale.

Así, el ayuntamiento de Lekeitio, en el que están representados PNV (6 concejales) y EA (2 ediles) -3 ediles de PNV y 2 de EA renunciaron a su escaño en 2007 porque esas cinco concejalías las reclama la izquierda abertzale en base al voto nulo a su candidatura ilegalizada-, enmarcó los incidentes en el "calentamiento global" que ha sufrido Euskadi durante el verano.

El consistorio lamentó que se ha convertido a los municipios en "escenarios donde echar un pulso para medir las fuerzas y a los ciudadanos convertirlos en víctimas del horror".

El consistorio destacó que los violentos "no tuvieron ningún escrúpulo en poner en peligro a personas y bienes del pueblo al que dicen defender pero que, en realidad, desprecian y utilizan para esconderse cobardemente y conseguir sus fines"

EA también condenó los incidentes y pidió que "se atempere el clima de tensión y enfrentamiento político" y que los partidos actúen con "responsabilidad y prudencia".

El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, afirmó que se trata de una violencia ejercida por unos "descerebrados" con pretensiones de "imposición totalitaria".

El consejero de Interior, Rodolfo Ares, dijo que los autores son "fanáticos que quieren reventar las fiestas para atacar a las instituciones democráticas y defender a los terroristas" y que la Ertzaintza "seguirá trabajando con firmeza, mesura y profesionalidad para mantener el orden público, hacer respetar la ley e impedir que quienes amparan y justifican la violencia terrorista se apoderen de los espacios públicos".

Los máximos responsables del PSE y del PP en Vizcaya, José Antonio Pastor y Antón Damborenea, respectivamente, expresaron su apoyo a la Ertzaintza, "hasta conseguir que las calles de Euskadi sean espacios de libertad y de disfrute de las fiestas en paz".