Hernán Casciari: "El mejor currículum es una obra online"

Es curioso que el gurú televisivo de España sea un argentino. Hernán Casciari escribe desde hace dos años el blog 'Espoiler' (castellanización fonética del término inglés spoiler, que significa estropear, desvelar un final). Pionero también de los blogs literarios —es célebre su forma de jugar con ellos, con su ficción y realidad—, desde 2004 cuida de 'Orsai', "un juego breve" hecho a base de cuentos que empezó a enviarles a sus amigos de Buenos Aires "para no perder el contacto ni los argentinismos a la hora de narrar".

Casciari alegre.

Semanalmente Casciari habla de sus filias y de sus fobias televisivas: de lo maravilloso; de lo que se puede ver —sin ver— mientras plancha la ropa escolar de su hija y de las cosas que de ninguna manera debemos sintonizar. Y lo hace con gracia y cinismo porteño. Su residencia en España tiene más que ver con el amor que con 'El Corralito', a pesar de que sea vecino de Girona precisamente desde 2000. Conoció a su mujer, una catalana, ese mismo año en un viaje a París y aquí se quedó.

¿Dónde hay más cultura internauta, en Argentina o en España?

No es agradable hacer esa clase de comparación entre un país desarrollado y otro que siempre parece estar saliendo de una crisis eterna. Argentina y España tienen una cantidad similar de habitantes (entre 40 y 45 millones) pero el acceso a la tecnología no es similar. En España hay muchísima más cultura tecnológica, y en Argentina hay muchísima más cultura creativa. En el ámbito de los blogs esto se nota muchísimo: en España los diez más leídos son de tecnología; en Argentina, entre los cinco más leídos, dos son literarios.

¿Cómo de popular te sientes a partir de tu experiencia? ¿Te reconoce la gente?

No me conoce nadie. Vivo en un pueblo pequeñito en la montaña, a mitad de camino entre Girona y Barcelona, y nadie sabe de qué forma me gano la vida. Cuando camino por la calle todos mis vecinos ven a un gordo un poco raro, en bermudas, que lleva a su hija al colegio sin peinarse. Yo creo que sospechan que tengo algo que ver con la venta de armas.

¿Cómo llega a El País un escritor argentino? ¿Te llaman? ¿Les mandas un CV?

No sé cómo se llega porque nunca pisé la redacción del periódico. En mi caso, un día sonó el teléfono y me ofrecieron hacer un blog para la versión digital del diario, y un tiempo después sonó otra vez el teléfono y me ofrecieron escribir también en el periódico de papel. Casi tres años después, sigo sin conocer la cara de las personas a las que les dije "sí, hagamos cosas". Yo trabajo desde casa, ellos me pagan desde Madrid. Sobre los currículos, ya creo que no son necesarios si tienes una obra online. Un blog es también tu escaparate: allí se nota si eres constante, si eres creativo, si eres exigente, si te superas. Ya pasó de moda decir en un folio lo que harías si te contratan. Ahora es preferible hacerlo por tu cuenta, y que lo noten.

¿Cómo es tu proceso de escritura? ¿Tienes ritos o manías?

Tuve muchas manías cuando era escritor analógico: la temperatura del café, la música, el tipo de pantalón holgado y con elástico. Pero en la etapa digital tengo una sola manía, un solo rito: estar conectado mientras redacto, consultar mucha bibliografía, tener los datos a mano.

¿Lees otros blogs?

Tengo un feed con unos quince blogs que reviso a menudo. Son de amigos. No escribo comentarios en ninguno de ellos porque los leo desde el bloglines directamente.

¿Tiene mejor guión 'A dos metros bajo tierra' que la vida real?

'A dos metros...' es uno de los mejores dramas de este tiempo, pero si hubiera que elegir, me quedo con la vida real: hay más personajes, dura más temporadas, y aunque muchos de los protagonistas están desdibujados, el personaje principal es mi hija, y yo, de ella, soy fan.

¿Es el blog el fin de tu proyecto creativo o te apetece hacer algo más ambicioso? ¿Tus libros se reciben tan bien como Orsai?

Diría que es el principio, el inicio, de mis proyectos creativos. En los blogs surgen los borradores de lo que después serán libros, obras de teatro, cortometrajes, artículos de prensa o películas. El blog es la cocina donde todo está comenzando a hervir.

¿Cuántos lectores de promedio tienes por post en cada blog?

Casciari serio.

Son irrelevantes esos números. Es lo que menos debería importarle al gestor de un blog. La cifra que de verdad importa son los minutos que un lector (que entra por primera vez) permanece navegando por tu proyecto. Hay un modo de saberlo, por supuesto: se toman las IPs desconocidas y se promedia el tiempo de permanencia. Un blog funciona si ese promedio supera los 45 segundos. Orsai tiene un promedio de más de siete minutos.

¿Eres escritor o periodista?

Antes que ninguna otra cosa, soy mentiroso. Y de las dos opciones que me das, en una ser mentiroso es un defecto y en la otra es una virtud. Soy las dos cosas.

Tus comentaristas son bastante respetuosos si los comparamos con los de otros blogs célebres. ¿Eres consciente de ello? ¿Soportarías la crítica?

La falta de respeto no es lo mismo que la crítica. En mis blogs hay respeto porque yo ejerzo desde las sombras, no dejo nada librado a ese azar. Y también hay críticas. Lo que no hay son trolls, ni tirabombas dialécticos. Y cuando aparecen los elimino, no soy paciente ni democrático con ellos.

¿Harías un blog político?

El único secreto para hacer un blog es hablar sobre algo que te obsesione, algo de lo que hablas también en las sobremesas con amigos, algo que haces, que practicas, que tiene muchísimo que ver con tu vida y con tu historia. Una manía, una patología. Y la política es la segunda cosa que me produce más aburrimiento en el mundo, después de la película 'West Side Story'. Jamás haría un blog sobre política, ni sobre comedias musicales.

¿Consumes internet en otras vertientes? ¿Qué crees que aportan las redes sociales?

Consumo internet en todas las vertientes que existen. La forma más rápida para que mi madre vea a su nieta se llama youtube, la forma más económica de conversar con mis amigos se llama skype, ir al cine se llama bittorrent, comprar un libro se llama paypal, no me acuerdo de tal cosa se llama google, qué será de la vida de aquel compañero se llama facebook, limpiar diariamente los historiales se llama porno, en qué fecha murió se llama wikipedia, cómo salió Racing se llama prensa digital. Todo lo que me importa está, de alguna forma, allí. O te queda más cerca allí.

Tus cinco series de siempre.

Subo a seis, no puedo con cinco: 'El Chavo', 'A dos metros bajo tierra', 'The Office', 'Seinfeld', 'Okupas' y 'Perdidos'. Allí hay de todo: la más vieja es de 1974, y las más moderna aún no concluyó. Hay comedia y drama; hay yanquis, inglesas y latinoamericanas. Esas seis, comenzando por la primera, me modificaron la vida para mejor.