Un monumento rememora la riada que arrasó Las Berlanas (Ávila) hace 50 años

Las Berlanas (Ávila).-  Un monumento del escultor granadino José Merino rememora desde este mediodía la riada que sufrió el municipio abulense de Las Berlanas hace ahora cincuenta años, que arrasó las viviendas de adobe de más de 50 familias y acabó con la vida de dos mendigos del vecino pueblo de Pradosegar.

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(EFE)

Vista del monumento, obra del escultor andaluz, José Ángel Merino, que ha sido inaugurado hoy por el presidente de las Cortes de Castilla y León, José Manuel Fernández Santiago, y el alcalde de Las Berlanas, Avelino Fernández.

Según ha explicado a Efe Maximiliano Fernández, uno de los vecinos de este municipio de 342 habitantes situado a 20 kilómetros al norte de la capital abulense, "hoy se cumple medio siglo desde aquel tráfico 29 de agosto de 1959, en el que el barrio de El Burgo fue derruido por causa de las intensas lluvias y de las aguas torrenciales".

Una catástrofe que a su juicio "también vino motivada por la impericia de quienes construyeron un puente en el cauce del río que se anegó con el arrastre de materiales, entre ellos numerosas encinas que estaban siendo taladas, originando un improvisado y enorme embalse, cuya ruptura provocó la avalancha de agua y la consiguiente inundación del barrio de El Burgo".

Como consecuencia de esta riada, según ha explicado a Efe otro lugareño, Ernesto de Juan, que entonces tenía 29 años, "todo se originó por una gran tormenta que duró unas cuatro horas y que en torno a las 16,30 horas provocó esa gran riada desde la carretera de Salamanca hasta el pueblo, que arrasó casas, cobertizos y acabó con la vida de muchísimos animales y de dos personas que se encontraban en un cobertizo del Prado de Abajo".

"La mayoría de las casas de El Burgo eran de adobe y no resistieron la fuerza del agua, quedando en pie sólo algunas de mejor calidad, entre ellas la mía, donde fuimos refugiando a la gente que lo había perdido todo, la vivienda, los animales y las tierras", ha relatado Ernesto de Juan.

Los vecinos de El Burgo, a excepción de los dos mendigos de Pradosegar, salvaron la vida cruzando la avenida de agua atados con sogas, a lomos de caballerías o saltando de tejado en tejado hasta llegar a la ermita de la Virgen de los Dolores y a la plazuela más alta, ha apuntado Custodio Martín, otro vecino de Las Berlanas que vivió en primera persona la tragedia y que ha asegurado que "si llega a producirse por la noche, la desgracia habría sido mucho mayor".

Cuatro años después de este desastre natural y gracias a las gestiones del entonces alcalde berlanés, Argimiro Galindos, y del gobernador, José Antonio Vaca de Osma, se construyó un nuevo barrio, conocido hoy como el Barrio Nuevo, para las personas que quedaron sin vivienda, así como una iglesia, casa parroquial, escuelas, centro de higiene y varios comercios.

Durante esos cuatro años, según ha explicado a Efe el actual alcalde, Abelino Fernández, "todas esas personas afectadas estuvieron viviendo en casas de familiares y amigos", lo que da muestra del "ejemplo de solidaridad" que dio este pueblo abulense.

Hoy, cincuenta años después, en el antiguo barrio de El Burgo apenas quedan algunas casas en pie y precisamente una de ellas acoge estos días en los que Las Berlanas celebra sus fiestas una exposición sobre la riada, que reúne fotografías de la catástrofe, así como artículos y declaraciones de la gente y actas del Ayuntamiento.

Los actos conmemorativos del 50 aniversario de la riada han arrancado esta mañana con una misa de campaña junto a la ermita de la Virgen de los Dolores y una procesión por el barrio de El Burgo, en la que han estado presentes diferentes autoridades, entre ellas el presidente de las Cortes de Castilla y León, José Manuel Fernández Santiago, así como el senador Ignacio Burgos y el procurador regional Roberto Jiménez.

Tras los actos religiosos, todos los vecinos de Las Berlanas se han trasladado hasta un parque cercano donde ha sido inaugurado el monumento en recuerdo de la riada, una obra del granadino José Merino en acero corten que representa el agua y el dolor por la tragedia vivida hace medio siglo en esta localidad.