El Athletic se enfrenta a un reforzado Tromsoe

Redacción deportes.-  El Athletic Club de Bilbao defenderá hoy en el Estadio Alfheim el agónico 3-2 que obtuvo frente al Tromsoe en San Mamés en la ida de la última previa de la Liga Europa para poder alcanzar así el primer gran objetivo que se ha marcado el equipo rojiblanco esta temporada.

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(EFE)

El mediocentro del Atlétic de Bilbao, Igor Gabilondo (iz) lucha por el balón con el centrocampista brasileño del RCD Espanyol, Jonatas Domingos (d), durante el partido correspondiente a la trigésima jornada de Liga de Primera División. EFE/Archivo

El Tromsoe ha visto reforzada su confianza con el buen resultado conseguido en el partido de ida, en el que fue ganando buena parte del encuentro, por lo que el equipo noruego se ve capaz de eliminar al Athletic.

El codiciado pasaporte a la fase de grupos es el premio que ha venido buscando el equipo vizcaíno desde que comenzó el trabajo el 6 de julio a lo largo de un camino bastante más tortuoso de lo previsto ante rivales de ligas menores como el Young Boys suizo o el propio conjunto noruego.

El equipo de Joaquín Caparrós ha sembrado muchas dudas en esta atípica pretemporada. Sin remontarse a la primera previa, los tremendos apuros pasados en la ida ante el Tromsoe, que llegó a tener la eliminatoria en su mano con un 1-2 a cinco minutos del final, o la nueva imagen de impotencia ofrecida en la Supercopa ante el FC Barcelona no han ayudado a aclarar ese gris panorama.

Al final, una combinación de fe y fortuna aderezada con oportunísimos chispazos, principalmente de la revelación Oscar de Marcos, ha colocado al Athletic a las puertas de la Liga Europa en un peculiar escenario como es el Alfheim, el campo de Primera División situado más al norte del planeta.

Al margen de su superficie de hierba artificial, que el equipo rojiblanco ya probó en su visita a Berna ante el Young Boys, el estadio de la ciudad lapona tiene unas dimensiones de 110 metros de largo por 70 de ancho que le hacen sobrepasar en más de 500 metros cuadrados la superficie de San Mamés.

Caparrós, quien sacrificó el partido de vuelta de la Supercopa dando descanso a siete titulares con la mente puesta en este choque decisivo, presentará previsiblemente al once que se enfrentó en la ida al equipo de Per-Mathias Hoegmo con la única duda de la participación de Aitor Ocio.

El central vitoriano tiene inflamada su rodilla izquierda y, en caso de no estar en condiciones de jugar, su puesto sería ocupado por Ustaritz e incluso por Mikel San José, quien aún no ha debutado desde que se concretara hace diez días su cesión por parte del Liverpool.

El resto del equipo, salvo sorpresa, estará formado por Iraizoz en la portería, Iraola y Castillo en los laterales; Amorebieta como central zurdo; Javi Martínez y Yeste formando el doble pivote apoyados por Susaeta y el juvenil Muniain en las bandas; y De Marcos y Llorente en punta.

En el Tromsoe, aun manteniendo cierta cautela, jugadores y técnico confían en sus opciones frente a un rival al que consideran pueden derrotar, en palabras del delantero Rushfeldt, lo que constituiría el mayor logro europeo del conjunto noruego, sólo equiparable a la eliminación del Galatasaray turco en 2005 en la antigua UEFA.

Para lograr esa gesta el Tromsoe contará con el equipo al completo, por lo que puede repetir el once de San Mamés.

El último resultado cosechado en liga no invita sin embargo al optimismo: el Tromsoe, tercero el año pasado, dio una mala imagen y cayó en la cancha del recién ascendido Odd (1-0), tercero en la tabla, y se sitúa ahora en la novena plaza, con sólo seis puntos de margen sobre la zona de descenso.

Con las entradas agotadas, las autoridades locales han habilitado una gran carpa en una de las plazas principales para que el resto de hinchas puedan juntarse y animar a su equipo.

Ficha técnica:

Tromsoe IL: Ramovic; Hogli, Tore Reginiussen, Koppinen, Larsen; Knudsen, Knarvik, Jenssen, Lindpere; Moldskred y Rushfeldt.

Athletic Club: Iraizoz; Iraola, Ocio, Amorebieta, Castillo; Susaeta, Javi Martínez, Yeste, Muniain; De Marcos y Llorente.

Arbitro: Tony Chapron (Francia).

Campo: Estadio Alfheim.