Samur y Clínico cuentan con un sistema para prevenir muertes como la de Jarque

Madrid.-  Evitar muertes como la del jugador del Español Daniel Jarque es el objetivo del trabajo conjunto que desarrollan los servicios de emergencias del Ayuntamiento de Madrid y el hospital Clínico San Carlos para detectar alteraciones genéticas asociadas a muerte súbita en los deportistas jóvenes.

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(EFE)

Imagen de una ambulancia del Samur en Madrid. EFE/Archivo

De este modo, el Samur-Protección Civil y este hospital madrileño vienen sumando esfuerzos desde el pasado mes de abril para detectar anomalías genéticas entre quienes participan en las competiciones deportivas populares que se celebran casi semanalmente en la capital.

Los primeros en actuar en este dispositivo de prevención son los efectivos de emergencias del Ayuntamiento, que son los que atienden de forma preventiva todos los eventos deportivos.

En el transcurso de los mismos "muchos deportistas amateurs sufren desmayos, síncopes o pre síncopes que, hasta hace unos meses, no tenían mayor transcendencia si podían ser solucionados en el acto por los facultativos", ha explicado a Efe el subdirector de los servicios de Emergencias del Ayuntamiento de Madrid, Fernando Prados.

Desde abril, sin embargo, a todos los ciudadanos que sufren algún incidente de este tipo se les aplica el código 33 (que es como se ha venido a denominar esta práctica) y son derivados directamente a las Urgencias del Hospital Clínico, ha agregado Prados, "donde comienza la segunda fase de este programa preventivo".

Una vez allí, según ha explicado el jefe de Urgencias de este centro hospitalario, Pedro Villarroel, los pacientes son sometidos a todo tipo de pruebas cardiovasculares para determinar "cuál ha sido la causa del episodio que han sufrido".

Si la causa del desvanecimiento no es detectable en estas pruebas, el Clínico ofrece al paciente la posibilidad de ir más allá y en Urgencias se le ofrece la posibilidad de someterse a un análisis genético que será el que determine si la persona cuenta con alguna alteración en su ADN asociada a la muerte súbita.

La prueba, que en Madrid se realiza de forma exclusiva y pionera en la Unidad de Investigación Cardiovascular del Clínico, "consiste simplemente en extraer al paciente una pequeña muestra de sangre de la que se aisla el ADN para estudiar si existen genes asociados a patologías inductoras de muerte súbita con el ejercicio", ha afirmado el doctor Antonio López, responsable de esta unidad.

Los resultados de este análisis están listos en un plazo de entre tres y cinco meses y, los casos en los que sea necesario, "sirven para prevenir y así evitar un futuro fallo en el corazón no sólo de la persona que se ha sometido a la prueba sino de toda su familia", ha señalado el doctor Villarroel.

De este modo, ha añadido el subdirector del Samur, el afectado "puede rehacer o adaptar su actividad deportiva para encaminarla a ejercicios que posibiliten que su corazón pueda seguir latiendo".

El doctor López ha señalado que la Unidad de Investigación Cardiovascular del Clínico de Madrid comenzó a desarrollar estos análisis genéticos desde la muerte por paro cardiaco del jugador del Sevilla Antonio Puerta, hace apenas dos años.

Los primeros en someterse a estos estudios fueron los futbolistas del Atlético de Madrid y, posteriormente, comenzaron a trabajar con el Samur, cuyos facultativos son los que casi todos los fines de semana atienden en las calles de la capital a los deportistas amateurs que sufren desmayos y que, desde abril, cuentan con la posibilidad de conocer su mapa genético en el Clínico.

El pasado año, por ejemplo, los servicios de emergencias del Ayuntamiento de Madrid realizaron 1.300 servicios preventivos de los que más de 700 se desarrollaron en eventos deportivos.

Con el fin, también, de salvar a los ciudadanos de las paradas cardiacas, el Ayuntamiento de Madrid comenzó a instalar hace dos años desfibriladores automáticos en las instalaciones de la ciudad que concentran un elevado número de personas, como polideportivos o centros comerciales, en donde varias personas han salvado ya la vida gracias a la existencia de estos aparatos.