Técnicos dicen que la venta de Mercasevilla no usó los procesos habituales

Sevilla.-  Dos técnicos que intervinieron en la adjudicación de la opción de compra sobre los terrenos de Mecasevilla han dicho hoy a la juez que las condiciones que permitieron su adjudicación a la empresa Sando no eran las habituales ni las que ellos habrían aconsejado.

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(EFE)

Dos técnicos que intervinieron en la adjudicación de la opción de compra sobre los terrenos de Mecasevilla han dicho hoy a la juez que las condiciones que permitieron su adjudicación a la empresa Sando no eran las habituales ni las que ellos habrían aconsejado. EFE/Archivo

La juez de instrucción 6 de Sevilla, que investiga la presunta petición de comisiones ilegales por parte de tres directivos de Mercasevilla, ha centrado ahora sus pesquisas en lo que ha calificado como "adjudicación fraudulenta" a Sando del derecho de compra de los actuales terrenos de la empresa pública.

Fuentes del caso han informado a Efe de que la juez, a la vista de lo declarado hoy por estos técnicos, ha anunciado a los abogados personados que suspende la declaración como testigo, prevista para el viernes, de Jorge Piñero, vicedecano del Colegio de Abogados de Sevilla y asesor jurídico de Mercasevilla que actuaba como "secretario de hecho" de la empresa, para decidir si lo cita como imputado.

Según han dicho los técnicos, los detalles del concurso fueron fijados por Piñero y por Fernando Mellet, ex gerente de Mercasevilla ya imputado en la causa, y de no haberse fijado las condiciones que favorecieron a Sando, ellos habrían adjudicado la venta a la empresa Noga.

Las declaraciones realizadas hasta ahora ante la juez han mostrado que Sando realizó donaciones a la Fundación Mercasevilla por importe de 246.000 euros al tiempo de ser adjudicataria de la opción de compra sobre sus terrenos.

En el texto de sus declaraciones, a las que ha tenido acceso Efe, los dos técnicos que intervinieron en el concurso, llevado a cabo en el año 2006, han asegurado que las condiciones no eran las habituales ni las que ellos recomendarían.

La testigo M.V.B.S., técnico urbanista, ha afirmado a la juez que, en sus 23 años de ejercicio, nunca ha visto la cláusula de rechazar las ofertas que contuvieran un "alza desproporcionada" del precio, ya que se trata una interpretación de la normativa que en realidad está prevista solo para las "bajas desproporcionadas".

Según la testigo, el "derecho de tanteo" que Mellet o Piñero le dijeron que Sando poseía sobre los terrenos era una cláusula que "no le gustó, porque era una ventaja sobre los demás".

Su compañero J.A.R.M. ha dicho que "nunca en su trayectoria profesional ha visto u oído la limitación al alza del precio", una cláusula que decidió dejar fuera del concurso a quienes presentasen una oferta diez unidades porcentuales por encima de la media aritmética de las demás.

Según este testigo, Mellet les explicó que tal cláusula tenía por objeto evitar que la futura venta se convirtiese "en una subasta, y por ello con fines especulativos", pero si de él hubiera dependido, "no se habría limitado al alza el precio de la opción de compra".

Dejando aparte tal cláusula que beneficiaba a Sando y teniendo en cuenta el precio ofrecido por ambas empresas, el testigo ha dicho que él personalmente "habría adjudicado el concurso a Noga".

También han asegurado que ellos eran más partidarios de la subasta pública en lugar del concurso público elegido, pues con tal medida se hubiese evitado la especulación que, al parecer, era el objetivo del Ayuntamiento.

No obstante, ambos han asegurado que no saben si el concurso se dirigió para otorgar a Sando la opción de compra, ya que "de ser así, se hubiese intentado un pliego más sencillo" y han afirmado que no creen que el proceso fuera premeditado para que Sando fuera la adjudicataria "dado el nivel de las empresas que presentaron sus ofertas".