Las instituciones y partidos navarros, juntos en silencio contra ETA

Pamplona.-  Representantes de las principales instituciones y de las formaciones políticas de la Comunidad foral han escenificado hoy en una concentración silenciosa ante el Parlamento de Navarra el rechazo de la sociedad navarra al último atentado de ETA en Mallorca.

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(EFE)

Los féretros de los dos guardias civiles asesinados ayer por ETA, portados a hombros por compañeros del cuerpo y cubiertos con la bandera de España, han sido recibidos con una ovación cerrada al entrar en la catedral de Mallorca.

Encabezados por el presidente en funciones de la Cámara navarra, Javier Marcotegui, convocante del acto, al mismo han asistido además el jefe del Ejecutivo foral, Miguel Sanz, junto a varios de sus consejeros, y la delegada del Gobierno en Navarra, Elma Sáiz, a quienes han acompañado parlamentarios y dirigentes de las formaciones UPN, NaBai, PSN, CDN e IUN.

Asimismo, hasta el lugar se han acercado los secretarios generales de UGT y CCOO en Navarra, Juan Goyén y José María Molinero, respectivamente, o el presidente del Consejo de la Juventud de Navarra (CJN), David Chivite, quienes junto al resto de los concentrados han prorrumpido en un aplauso al término de los cinco minutos de silencio en los que ha consistido el acto.

Finalizado éste, el presidente del Gobierno foral, Miguel Sanz, ha mostrado a los periodistas su "condena, rechazo y repudio" contra un atentado con el que, según percibe "en el sentir de todos los ciudadanos de bien", ETA "no va a conseguir absolutamente ninguno de sus objetivos".

Al respecto, Sanz ha recordado que, tras 50 años de existencia "clamando por Euskal Herria", ETA ha logrado "sembrar el terror y el dolor para no conseguir ni uno de sus objetivos. Por tanto, que ETA se olvide, porque los demócratas vamos a estar cada día más unidos y más firmes a la hora de defender la libertad y la justicia".

El presidente ha tenido además palabras de apoyo para la labor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y para el "sacrificio, pundonor y compromiso" de sus miembros, al tiempo que ha criticado actitudes como las de Nafarroa Bai, cuyo representante se ha abstenido en la votación del texto de condena del atentado aprobado por la Mesa y la Junta de Portavoces del Parlamento foral.

Al respecto, Sanz ha dicho "no entender" cómo no se puede apoyar un comunicado de condena porque éste contenga "una referencia mostrando el apoyo a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado", cuando los hechos indican que a los dos agentes del atentado de Mallorca "no los han matado por llamarse Carlos o por llamarse Diego. Los han matado por pertenecer a una institución de España, por ser españoles y por ser guardias civiles".

"Ese doble lenguaje -ha dicho en referencia al de NaBai- creo que debe ser una vez más criticado y cuestionado por quienes, al margen de las ideologías, defendemos por encima de todo la libertad, la justicia y la paz".

Por su parte, el presidente en funciones del Parlamento foral, Javier Marcotegui, ha considerado el atentado propio de "una actitud brutal, inhumana, más propia de series irracionales que de seres racionales".

"Desde esa perspectiva, espero que el Estado, con todos los instrumentos que tiene a su alcance y que le concede el Estado social y democrático y de derecho, persista e intensifique su lucha contra el terror y contra los terroristas para conseguir de una vez por todas la convivencia ciudadana pacífica", ha dicho Marcotegui.

Ha lanzado además un mensaje a los terroristas, el de que están "cada vez más solos y más perdidos, y no tendrán salida ninguna más que lógicamente la cárcel para responder de estas actitudes absolutamente monstruosas e irracionales".

También la delegada del Gobierno en Navarra, Elma Sáiz, ha expresado su "rotunda condena a este brutal asesinato" de dos agentes de la Guardia Civil y su solidaridad con los familiares, con algunos de los cuales ha tenido oportunidad de comunicarse ya que uno de los fallecidos, Diego Salvá, había nacido en Pamplona, de donde procede y donde reside su familia materna.

"Los terroristas saben que van a acabar todos en la cárcel, sin ningún tipo de miramiento, y ojalá que esta sea la última vez que tengamos que concentrarnos para condenar un acto como el que ha acontecido", ha subrayado Sáiz.