"Motown 4 real" rinde tributo a Michael Jackson en los Veranos de la Villa

Madrid.-  En días de duelo mundial por el fallecimiento del "Rey del Pop", Michael Jackson, los madrileños Veranos de la Villa no han perdido la ocasión y, con una actuación conjunta de la Jack Ashford Band y Tito Jackson, hermano del célebre artista, han rendido esta noche un emotivo tributo al intérprete de éxitos como "Thriller" o "Billie Jean".

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(EFE)

Tito Jackson, uno de los hermanos del fallecido Michael Jackson, durante su actuación esta noche en el escenario Puerta del Ángel de la Casa de Campo de Madrid, dentro de los actos programados en los Veranos de la Villa 2009.

No obstante, el espectáculo "Motown 4 real" no ha perdido de vista su auténtico objetivo: el sincero y necesario homenaje al sello discográfico Motown cuando se cumplen cincuenta años de su fundación, así como a los músicos de estudio que hicieron posibles sus grandes éxitos, The Funk Brothers.

Soul y rhythm & blues, sí; funk y gospel, también. En una celebración de la música negra no podían faltar los componentes que hicieron del "sonido Motown" un dispensador de composiciones memorables. A todo ello se sumaron varios temas de The Jackson Five, el grupo familiar que concentró los primeros logros de "Jacko".

Precedidos por la actuación del cantante Ryan Shaw, una voz portentosa que aúna en su repertorio la ecléctica mezcla Motown, la Jack Ashford Band saltó al escenario capitaneada por el propio Jack Ashford, miembro de los Funk Brothers originales, y con el cantante Larry Johnson oficiando de maestro de ceremonias.

El recital arrancó al ritmo que marcaba la trompeta de Carmelo Scaffidi en "Uptight", enlazando a continuación con "Heat wave", un derroche de soul que levantó de sus asientos a los 2.000 espectadores congregados.

La electrizante versión de "Can't hurry love" dio paso a la más reposada "Neither one of us", una balada plena de fuerza y pasión en la que destacaron los coros angelicales de Jenean Cranert. "Es una ocasión memorable, y estáis haciendo historia", confió Ashford al respetable en un momento de íntima conexión entre público y artista.

Al tiempo que "Ain't no mountain high enough" provocaba el delirio en el patio de butacas, el gospel reclamó su espacio con la afectiva "Ain't nothing".

Ausente hasta ese momento, Tito Jackson apareció en escena para agasajar la memoria de su hermano. "No sabía si suspender mis actuaciones por la tragedia de Michael, pero mi familia me dijo que a él le habría gustado que hiciera esta gira", explicó entre los aplausos y el respeto de los aficionados.

El recuerdo del hombre que cambió para siempre la música pop cristalizó en distintas canciones que marcaron su etapa con The Jackson Five, caso de "ABC", "Dancing machine" o "Jailhouse hotel", un popurrí de media hora tras el que Tito se despidió para el resto de la noche.

A velocidad de vértigo se sucedieron la maravillosa "What's going on", que inmortalizó Marvin Gaye, y las enérgicas "Grapevine" y "Losing you", creando el ambiente perfecto para encarar los últimos minutos de la actuación.

La declaración de amor que se esconde tras las palabras de "My girl" y la alocada "Shotgun" con que finalizó la velada dispararon la fiesta en gradas y escenario, un final apropiado para celebrar el insigne legado de la música negra.