El vecino de Calahorra herido en el encierro continúa ingresado en la UCI

Pamplona.-  Los ocho corredores que permanecen hospitalizados tras los encierros del viernes y de ayer evolucionan favorablemente de sus lesiones, aunque tres de ellos siguen en la Unidad de Cuidados Intensivos con pronóstico grave, entre ellos un vecino de Calahorra (La Rioja).

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(EFE)

Dos mozos caidos en el suelo observan en el tramo de Mercaderes la llegada de los mansos y los toros de la ganadería gaditana de Fuente Ymbro, que han protagonizado el penúltimo encierro de los Sanfermines 2009 con una veloz y limpia carrera en la que la menor afluencia de corredores ha propiciado un vistoso espectáculo.

A estos heridos se suman los otros tres corredores, uno de ellos de Logroño, que han sido conducidos esta mañana a los hospitales pamploneses, aunque es probable que éstos puedan abandonar los centros a lo largo del día de hoy, ya que ninguno está grave.

Entre los ingresados en días pasados se encuentra en el Hospital de Navarra el estadounidense de 66 años, que fue trasladado el pasado 10 de julio con hemoneumotórax y contusión pulmonar.

En este mismo centro permanece el pamplonés de 44 años que resultó herido por asta de toro en el tórax y en el muslo al cebarse con él un "miura" mientras corría el encierro de ayer en el tramo de Telefónica.

También en la UCI, aunque en el Hospital Virgen del Camino, está el corredor de 56 años, natural de Calahorra (La Rioja), con una cornada en el cuello producida ayer por este mismo toro, de nombre "Ermitaño", en Mercaderes.

El director del Hospital Virgen del Camino, Fernando Boneta, ha precisado que los tres evolucionan favorablemente pero ha advertido que las cornadas "en cualquier sitio" y más en el tórax y cuello, tienen riesgo de infección, con lo que hay que esperar unos días para confirmar su evolución favorable.

Además de estos tres corredores, hay cinco mozos hospitalizados en planta del Hospital Virgen del Camino que, al igual que los anteriores, registran una evolución favorable.

Dos de los ingresados resultaron heridos en el encierro del 10 de julio, uno de Londres y otro de Sevilla, con sendas heridas por asta de toro en el muslo, y los otros tres -procedentes de Madrid, Pamplona y Noáin (Navarra)- fueron heridos ayer con una cornada en el muslo el primero, una cornada en el brazo izquierdo el segundo y una herida en el cuero cabelludo el tercero.