Las autoridades califican de homicidio la muerte del ex mariscal McNair

Nashville (Tennesse.-  Nashville (Tennesse, EEUU), 5 jul (EFE).- La policía de Nashville anunció hoy que la muerte por varios disparos del ex mariscal de campo de los Titanes de Nashville y de los Cuervos de Baltimore, Steve McNair, se dio como consecuencia de un homicidio.

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(EFE)

Miembros de la policía acordonaron la escena en donde Steve McNair, ex mariscal de campo del equipo de fútbol americano los Titanes de Tennessee, fue encontrado muerto con un disparo en la cabeza, junto a una mujer no identificada, en Nashville (TN, EEUU).

Sin embargo, las autoridades todavía no han podido determinar de que se haya tratado de un asesinato-suicidio involucrando a la mujer de 20 años de edad Shanel Kazemi, que también fue hallada muerta a su lado con un disparo de arma de fuego en la cabeza.

McNair, de 36 años, recibió cuatro disparos: dos en la cabeza y dos en el pecho, de una pistola semi automática, según informó durante una rueda de prensa, Don Aaron, el portavoz la policía de Nashville.

Kazemi, falleció a consecuencia de un disparo solitario que recibió en la cabeza, y el arma fue hallada bajo su cuerpo, explicó Aaron.

El portavoz de la policía también confirmó que McNair y Kazemi mantenían una "relación amorosa" desde hacia algunos meses, algo que desconocía la esposa del ex mariscal de campo.

A la pregunta si las muertes podrían haber estado motivadas por una pelea de pareja, Aaron reconoció que era una parte importante de la investigación que llevaba a cabo su departamento para tratar de esclarecer la muerte de Kazemi.

La policía también necesita realizar más entrevistas a amigos de Kazemi y McNair antes de determinar si la causa de su muerte fue un suicidio, explicó Aaron.

McNair, tres veces seleccionado al 'Pro Bowl' y que jugó el Súper Bowl con los Titanes en 2000, era casado y tenía cuatro hijos.

El ex mariscal de campo y Kazemi fueron hallados sin vida el sábado por la tarde en un condominio de Nashville que compartía con un amigo, y la policía dijo el domingo que, al parecer, ambos fallecieron temprano por la mañana del sábado.

McNair fue descubierto sentado sobre un sofá de la sala principal del apartamento, mientras que Kazemi fue hallada cerca.

La policía informó de que un testigo vio a McNair llegar al condominio entre la 1.30 y 2 de la madrugada del sábado y que el vehículo de Kazemi ya se encontraba allí. El apartamento donde fue encontrada la pareja está localizado cerca de un área donde hay restaurantes y clubes nocturnos, a pocos metros del río Cumberland y con vista al estadio de los Titanes.

Las autoridades de momento no están buscando sospechosos, y tampoco creen que la esposa de McNair esté involucrada.

Se esperaba que Mechelle McNair, madre de dos de sus cuatro hijos, recogiera las pertenencias de su esposo que están en poder de las autoridades. Los arreglos funerarios deben finalizar este lunes por la tarde, a lo más temprano.

"Ella sigue muy afectada, muy desencajada", dijo el agente de McNair, Bus Cook. "No tenemos ningún tipo de información de lo que pudo generar esta tragedia familiar".

McNair deja a Mechelle, su esposa de casi 12 años e hijos Júnior, Steven, Tyler y Trenton.

Cook, dijo que no estaba al tanto de que su cliente frecuentaba a Kazemi, una mujer cuyo nombre conoció a través de los reportes del incidente. "No tiene ningún sentido. No sé qué decir", señaló Cook.

El ex mariscal lideró a los Tennessee Titanes a una yarda de forzar el tiempo suplementario en el Súper Bowl de 2000, que perdieron 23-16 frente a los Carneros de San Luis y también jugó dos temporadas para los Cuervos antes de retirarse en abril de 2008.

El estilo de juego duro y muy físico le generó varias lesiones graves. Por varios años saltó al campo con dolor y su habilidad para soportarlo lo convirtió en una auténtica leyenda.

Una frase común entre ex compañeros de equipo y entrenadores que hablaron de McNair después de su muerte fue la descripción de él como un "guerrero", que nunca se daba por vencido en el campo.

Al parecer, McNair conoció a Kazemi en un bar deportivo y amigos declinaron describir la relación con la joven, quien trabajaba allí como mesera.

Una vecina en Nashville vio a McNair en el departamento de Kazemi tan a menudo -dos o tres veces a la semana- que pensó que el futbolista se había mudado allí.

Dos días antes de la tragedia, Kazemi fue arrestada por conducir ebria. McNair, quien le acompañaba, pudo irse en un taxi, pero pagó la fianza para liberar a la mujer.

McNair concluyó su carrera profesional de once temporadas con 31.304 yardas por aire y 174 pases de 'touchdowns'.