Van Gundy se ha convertido en el gran "villano" de las Finales

Orlando (EE.UU.).-  La victoria conseguida por Los Ángeles Lakers en el cuarto partido de las Finales de la NBA (91-99) ha generado entre los aficionados de los Magic de Orlando y comentaristas una serie de interrogantes relacionadas con el trabajo del entrenador Stan Van Gundy, al que presentan como "villano".

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(EFE)

El jugador de los Magic de Orlando Mickael Pietrus (i) habla con su entrenador, Stan Van Gundy (d), durante el cuarto juego de la final de la NBA contra los Lakers de Los Ángeles, que se disputó este jueves en el Amway Arena de Orlando (Fl, EE.UU.).

Los aficionados de los Magic han mostrado su "disgusto" en programas de radio y televisión locales por cómo el equipo, a falta de 30 segundos para la conclusión y un parcial de 87-82, se dejó empatar el marcador para ir a la prórroga y perder.

Para todos ellos, además de los errores de los jugadores en el campo, la responsabilidad del hundimiento del equipo corresponde a Van Gundy.

Nadie entiende qué tipo de estrategia defensiva había montado Van Gundy en la jugada del triple de Fisher y hasta el propio entrenador de los Lakers, Phil Jackson, al concluir el partido, cuando le preguntaron qué hubiese hecho él de tener la ventaja de tres puntos, fue categórico: "Hacerle falta personal".

Jackson explicó que cuando tienes una ventaja de tres puntos y cinco segundos por jugarse no hay otra estrategia que la de impedir que te hagan un triple y para eso la garantía es hacer falta personal.

"No hay nada que pensar, es de libro", explicó Jackson. "No importa que te hagan los dos tiros de personal, tienes todavía la ventaja y luego estableces con la posesión de balón el ganar más segundos y que te hagan falta personal sobre el mejor tirador del equipo".

Todo eso fue lo que explicó Jackson sobre lo que hubiese hecho él de haber tenido la situación por la que estuvieron los Magic, pero no fue ni mucho menos el pensamiento de Van Gundy, quien también dio su versión al concluir el partido y la misma fue que se "equivocó".

"Mirando en retrospectiva, está claro que me equivoqué, que no hicimos buena defensa y que la lógica era haber forzado la personal", comentó Van Gundy. "Me perseguirá toda la vida la jugada".

Aunque Van Gundy volvió a admitir que él era el único responsable de la derrota, dentro del equipo no existe el mejor ambiente ante la sensación que están de nuevo a una derrota de perder el segundo título en la historia del equipo cuando podría ser todo lo contrario, necesitar sólo un triunfo para conseguir el primero.

"No creo que sea el momento de señalar culpables, se gana o se pierde en equipo", comentó Howard, que falló ocho tiros de personal y perdió siete balones. "Está claro que la pasada noche no merecimos la derrota, pero ahora esa valoración no sirve para nada".

Howard dominó bajo los aros con 21 rebotes y nueve tapones, la mejor marca en la historia de las Finales, pero las siete pérdidas de balón fueron consecuencia de la gran defensa que le hizo el ala-pívot español Pau Gasol, convertido en la gran pesadilla de la estrella de los Magic.

Gasol no tiene el poder físico de Howard, pero su gran clase, movimientos de pies, colocación y anticipación forzó a Howard a no sólo cometer las perdidas de balón sino también a que le pitasen varias veces la violación de los tres segundos dentro de la pintura.

"Se que tengo que hacer mejor las cosas, especialmente en el control el balón y los tiros de personal, pero ahora lo más importante es que dentro del equipo recuperamos la moral y estemos listos para el partido del domingo", comentó Howard. "Este equipo ha sabido sobreponerse a todo tipo de adversidades".

Sin embargo, también de manera privada, los jugadores de los Magic admiten que perder, no una sino dos, clarísimas oportunidades de ganar partidos decisivos a los Lakers no es el mejor camino para conseguir un título de liga.

"No hay duda de que estamos contra la pared y ganar tres partidos consecutivos a los Lakers no es la mejor de las situaciones", admitió el base Rafer Alston. "Pero vamos a luchar como lo hemos hecho en todos los partidos y ver que es lo que sucede".

Alston fue otro de los jugadores que sufrieron los efectos de las decisiones de Van Gundy al dejarlo sentado en el banquillo en el cuarto periodo y la prórroga para sacar a Nelson (2 puntos y 3 asistencias), que no está en su mejor forma.

"Mi obligación es la de jugar cuando me lo indica el entrenador y ayudar al máximo al equipo", comentó Alston. "Siempre que estoy en el campo lo doy todo, como creo que hace el resto de los compañeros".

Tampoco se entiende cómo no pudo ver la estrategia de doble equipo defensivo que Jackson estableció para anular la efectividad encestadora del alero Rashard Lewis al que los Lakers limitaron a sólo seis puntos (2-10 y 2-6 triples, sin tiros de personal), en 46 minutos.

Van Gundy quiere pasar página a lo sucedido en el cuarto partido, pero lamentablemente para él, no es lo que piensan los seguidores de los Magic, que ya lo tienen señalado como el "máximo" responsable de una derrota que los alejó de un título de liga.

"Soy profesional, admito mi responsabilidad, entiendo a los aficionados y a los periodistas, pero también se que la única manera de superar los errores y equivocaciones es hacer mejor trabajo en el próximo partido y para eso debemos estar preparados", señaló Van Gundy. "Las críticas ni me afectan ni me molestan, aprendo".