Oviedo advierte a Lugo que lo derrocaría si él promoviera una conspiración

Asunción.-  El general retirado Lino Oviedo, líder de un sector de la oposición paraguaya, advirtió al presidente del país, Fernando Lugo, que si una conspiración golpista partiera de él, se va a enterar "cuando ya esté afuera" del Gobierno.

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(EFE)

"Lo que (Lugo) busca es una lucha de clases para imponer el desgastado socialismo del siglo XXI o la continuación del marxismo fracasado del siglo XX", aseveró el general retirado Lino Oviedo, líder de un sector de la oposición paraguaya. EFE/Archivo

"Si yo le voy hacer un golpe de Estado (a Lugo), se va a enterar cuando ya esté afuera como (Alfredo) Stroessner que se enteró cuando estaba sitiado. Recién creyó que estaba afuera cuando lo llevé preso de la oreja", dijo Oviedo en declaraciones que publica hoy el diario asunceno Abc Color.

El ex jefe del Ejército, considerado uno de los artífices del golpe de Estado que en 1989 derrocó a Stroessner, se expresó así después de que Lugo se negara a retractarse de una acusación de presunta conspiración contra él al inicio de su mandato.

Oviedo, Nicanor Duarte (el anterior gobernante), una autoridad de la justicia electoral y el fiscal general del Estado, Rubén Candia, fueron acusados en septiembre pasado de haber tomado parte de una reunión realizada en la residencia del primero para una presunta trama golpista contra el Gobierno.

La Fiscalía desestimó esta semana la denuncia de Lugo, en momentos en que el gobernante rehusó retractarse como exigió Oviedo para participar de un diálogo convocado por el jefe de Estado con líderes de los principales partidos políticos del país para debatir los problemas del país.

"Imagínese quienes serían mis cómplices de un golpe de Estado, personas que no tienen mando de tropa", aseveró Oviedo, que había sido encarcelado por una condena de diez años de cárcel por una intentona golpista contra el Gobierno de Juan Carlos Wasmosy (1993-98).

La condena fue anulada por la Corte Suprema de Justicia, lo que permitió a Oviedo recuperar sus derechos cívicos y postular su candidatura presidencial en los comicios del 20 de abril de 2008, en los que fue tercero, el mismo lugar que ahora ocupa en el Congreso la agrupación política que lidera, la Unión Nacional de Ciudadanos Éticos (UNACE).

Asimismo, Oviedo criticó las constantes desavenencias entre los propios ministros de Lugo, debido a la diversidad ideológica de la alianza de amplia base ideológica que lo llevó al poder, y reafirmó que el objetivo del ex obispo es presuntamente acabar con los partidos tradicionales.

"Lo que (Lugo) busca es una lucha de clases para imponer el desgastado socialismo del siglo XXI o la continuación del marxismo fracasado del siglo XX. Por eso se ven ahora estos conflictos de campesinos contra productores (agrícolas), de ricos contra pobres", señaló.

Al insistir que UNACE no acompañará ninguna iniciativa del Gobierno, que no tiene mayoría en el Congreso, Oviedo calificó de "hipócrita", porque "muestra su artificial vocación democrática y al mismo tiempo quiere presentar ante el mundo su difícil convivencia con la oposición "autoritaria y reaccionaria".