Araújo admite "errores" en la gestión de CCM, pero defiende a sus directivos

Toledo.-  La vicepresidenta de Castilla-La Mancha y responsable de Economía, María Luisa Araújo, admite que se han cometido "errores" en la gestión de Caja Castilla La Mancha (CCM), pero opina que sus directivos han actuado "con lealtad" a la entidad y que son "gente seria, sólida y solvente".

Araújo hace estas declaraciones en una entrevista con Efe en la que analiza la intervención de CCM por el Banco de España y el informe de este organismo, que difundió ayer Efe, en el que sostiene que la "deficiente" gobernanza de la entidad socavó "su solvencia y su viabilidad".

La vicepresidenta de Castilla-La Mancha reconoce que "sin duda" en la gestión de la caja ha habido "errores" en la valoración de determinados riesgos y en la excesiva concentración en el sector inmobiliario, pero opina que fallos ha habido en todas las entidades financieras, pues de lo contrario no habría aumentado la morosidad en todo el sistema.

E insiste en que todas las decisiones del Consejo de Administración se han adoptado por unanimidad, "sin una sola discrepancia", lo que para ella es "una fortaleza de la entidad" que "por sí misma respalda la gestión que se ha desarrollado".

A este respecto, recuerda que el Consejo de Administración -sustituido ahora por tres administradores del Banco de España- no tenía carácter ejecutivo y estaba formado por personas "que no son expertos financieros", que tenían la información que les trasladaba el equipo directivo.

Araújo opina que esos directivos "han actuado con lealtad hacia la entidad y ofreciendo la información de que se disponía en cada momento", pero "la evolución de la economía ha sido imprevisible" y hace dos años "difícilmente se podría imaginar" la situación actual.

También está convencida de que los directivos "no han falseado las cuentas" de 2008 -que no fueron auditadas y el Banco de España está revisando-, pues se trata de "gente seria, sólida y solvente", aunque asume que "quizá" el supervisor "las tenga que corregir para dejar a la caja en una posición perfectamente saneada".

La responsable de Economía ha defendido que el Ejecutivo no cuestionara en su momento las decisiones de la entidad, pues "no es nuestra competencia y no creemos que sea correcto que haya algún tipo de injerencia en el funcionamiento de las cajas".

"Creemos en la independencia de las cajas", recalca Araújo, quien subraya que el Ejecutivo cumple sus obligaciones con CCM y con Caja Guadalajara, pero no se mete en sus decisiones hasta que el supervisor determina que hay "algún problema".

Reconoce que la ley regional de cajas dice que el Gobierno "podrá" someter a su autorización previa las inversiones de la entidad, la concentración de riesgos o la concesión de grandes créditos, pero insiste en que el Ejecutivo confía en que los órganos de dirección y gobierno de la entidad "son suficientemente maduros para tomar sus decisiones".

Por ello, no quiso injerir en las decisiones de la entidad hasta que el Banco de España planteó las primeras dificultades en su informe de octubre de 2008, momento en el que se iniciaron los contactos con la entidad y el supervisor.

Ahora, a su juicio, toca dejar trabajar al Banco de España y estudiar alternativas posibles para "una entidad que tiene mucho futuro".

A su juicio, la fusión con Unicaja, como expone el propio Banco de España, era la mejor solución para CCM, pero no salió adelante por la excesiva exposición mediática de la entidad, de la que responsabiliza a "las cien ruedas de prensa" que ha dado el PP este año sobre la situación de la caja.

"¿Hay alguien trabajando y viviendo de la confianza de la gente que pueda soportar esto?", pregunta la responsable económica de la Junta, quien ha opinado que la pérdida de confianza ha motivado la salida de depósitos y "el grave problema de liquidez" que ha motivado la intervención.