Una multitud ocupa más de tres kilómetros para despedirse de Alfonsín

Buenos Aires.-  En silencio y de forma ordenada, una multitud de argentinos aguarda pacientemente en una cola de más de tres kilómetros su turno para despedirse del ex presidente Raúl Alfonsín, velado en el Congreso con honores de jefe de Estado.

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(EFE)

Simpatizantes del ex presidente argentino Raúl Alfonsín realizan una fila para despedir sus restos, en el Congreso Nacional en Buenos Aires (Argentina).

Buenos Aires no recordaba una movilización semejante desde la muerte del general Juan Domingo Perón, en 1974, cuando se veló el cuerpo durante tres días y las autoridades determinaron cerrar las puertas del Congreso para proceder al entierro.

Hasta cinco horas han aguardado hoy muchos ciudadanos para rendir homenaje al "padre" de la democracia argentina, que falleció el martes, a los 82 años, víctima de un cáncer pulmonar.

Las largas colas ocupan más de tres cuadras (manzanas), lo que supone unos 3.000 metros, en los alrededores del Parlamento, en el corazón de Buenos Aires.

Todos esperan pasar durante unos segundos ante el cuerpo de Alfonsín, que reposa en un féretro descubierto, custodiado por una guardia de honor de granaderos.

El Congreso, que abrió al público a las 10.00 hora local (13.00 GMT) y tenía previsto cerrar diez horas después, ha decidido mantener sus puertas abiertas hasta medianoche ante la masiva afluencia de ciudadanos que quieren rendir homenaje al ex mandatario.

Cientos de coronas de flores siembran las escaleras de acceso al Parlamento, mientras un fuerte dispositivo de seguridad mantiene el orden en el exterior.

La familia Alfonsín ha invitado a toda la ciudadanía a participar del acto oficial y de la misa que se realizarán mañana, jueves, en la explanada del Congreso, antes del sepelio.

El ex gobernante será enterrado en la Bóveda de los Caídos de la Revolución del Parque de 1890, en el cementerio del barrio porteño de Recoleta.