Por PAULA CARRIÓN (SOITU.ES)
Actualizado 30-03-2009 16:08 CET
Ya llevamos un tiempo escuchando, leyendo y viendo todo el despliegue mediático e institucional que se está haciendo en torno a la reunión del G-20 el próximo jueves en Londres. Se supone que esta vez sí se va a refundar el capitalismo y de ahí la importancia de la cita. Desde hace unos días y hasta el mismo día de la cita el bombardeo de información va a ser incesante. Desde soitu.es te intentamos resumir en unos cuantos puntos lo importante , lo curioso y lo menos conocido de la trascendental reunión:
(REUTERS)
¿Nos sacarán del atolladero esta vez?
- 20+2+2 : Es la cantidad de países que asistirán a la cumbre. Los países más ricos y emergentes del mundo (además de la Unión Europea) forman los primeros 20 miembros. A estos se les suma España (que siempre ha mostrado su intención de formar parte del grupo de los 20) y Holanda, ambos invitados por Francia en la anterior cumbre y que Reino Unido ha mantenido. Los otros dos asistentes extra serán Tailandia y Etiopia. Entre todos suman el 90% del Producto Interior Bruto (PIB) mundial y representan el 80% del comercio global.
- Se hablará sobre... A estas alturas de la película ya sabemos casi todo lo que se va a tratar en la reunión del 2 de abril. David Vegara, secretario de Estado de Economía, ha sintetizado esta mañana el contenido de las reuniones en tres puntos: hacer frente a la crisis con mayores estímulos fiscales, hacer una mejor supervisión del sistema financiero y rediseñar el papel de las instituciones financieras internacionales. También se tratará (no se sabe cómo) de evitar medidas proteccionistas por parte de los países y ayudar a los estados que más están sufriendo las consecuencias de la crisis (mediante más aportaciones al Fondo Monetario Internacional).
- ¿Hay bandos? Todos los líderes mundiales están hartos de decir que lo importante de la cumbre son los puntos de unión y no de desunión. Sin embargo, lo cierto es que también hay puntos de desunión y que no hay que obviarlos. Obama llegará a Londres con la intención de convencer a los asistentes de que el gasto público es aún insuficiente (sobre todo el europeo) mientras que la canciller alemana y el presidente francés consideran que "la máxima prioridad es forjar la nueva arquitectura financiera global". Si no llegan a un acuerdo en estos puntos puede que la reunión no acabe con éxito.
- Los que arropan a Zapatero: El presidente del Gobierno español no va solo a esta cumbre. A su lado, para aclararle todo lo que sea necesario en materia económica, estarán el vicepresidente del Gobierno, Pedro Solbes, y el secretario de Estado de Economía, David Vegara. Javier Vallés, director del Departamento de Política Económica de la Presidencia del Gobierno, también asesorará al presidente. Además, también acudirán la secretaria de Estado de Comunicación, Nieves Goicoechea, y Milagros Hernando, directora del Departamento de Política Internacional y de Seguridad del Gabinete de la Presidencia del Gobierno.
- Nuestra niña bonita: España ha mandado a Gordon Brown (feliz anfitrión de esta cumbre) un decálogo con las propuestas españolas para hacer frente a la crisis. Aún así, Zapatero seguirá vendiendo al mundo lo que ya vendimos en Washington el pasado noviembre: nuestro sistema de supervisión bancaria. Un día más tarde de que el Banco de España interviniera a la primera entidad bancaria de esta crisis, Vegara ha dicho: "Es verdad que se ha intervenido una entidad [Caja Castilla-La Mancha] que supone el 1% del sistema financiero español pero esto no pone en duda la capacidad del sistema financiero español, al contrario pone en valor que nuestro sistema es sólido y solvente aunque no inmune".
- Más de 53 millones de euros: Entre seguridad extra, adecuamiento de las instalaciones y otros preparativos, la ciudad de Londres gastará alrededor de 50 millones de libras (53 millones de euros). Simon Jenkins cuenta en The Guardian que la cumbre de día y medio costará a los londinenses 7 millones extra en policías 'full time', 6 en decoración y puesta a punto y 12 más en otros costes. Las cifras bailan según quién las ofrezca: la oficina de exteriores británica cifra los gastos en 19 millones de libras mientras que otras organizaciones lo elevan a 80 millones. Aún así nada que ver cono los 285 millones de dólares (216 millones de euros) que se gastaron en la última cumbre del G8 en 2008 en Japón. Y todo esto en plena crisis.
- 4 horas y 35 minutos: Ese es el tiempo que emplearán los mandatarios de los países más importantes del mundo para intentar refundar el capitalismo. Parece poco comparado con los 22 días que Roosevelt, Keynes y White, entre otros, se tiraron encerrados en el complejo turístico de Bretton Woods (New Hampshire) para sentar las bases de la economía actual.
- El fracaso de 1933: El optimismo lleva a todos a intentar comparar la futura cumbre con la de Bretton Woods. Sin embargo, también sobrevuela el fantasma de la anterior reunión económica que tuvo como sede Londres. Aquella conferencia acabó en un estrepitoso fracaso por la negativa del presidente norteamericano de aceptar una paridad entre el dólar, el franco francés y la libra esterlina.
- Gordon Brown se la juega. El primer ministro británico ha puesto todas sus esperanzas políticas en el éxito del 'London Summit'. Brown no pasa por un buen momento político y espera que su buena gestión como anfitrión de la cumbre sea suficiente como para ganar popularidad dentro y fuera del Parlamento británico.
- Un menú de Jamie Oliver: Este mediático chef británico será el encargado de preparar la cena de honor del miércoles por la noche. En el menú finalmente no se incluirá el cerdo por respeto a los asistentes musulmanes.
- Meltdown amenaza: Un puñado de grupos anti capitalistas intentarán boicotear la cumbre. El día 1 a mediodía "asaltarán" el Banco de Inglaterra y la madrugada del día 2 intentarán acercarse lo máximo posible a los hoteles donde estén hospedados los líderes para protestar frente a ellos.
- 2.500 periodistas y 50 bloggers: 2.500 periodistas están acreditados para cubrir este acontecimiento histórico. Serán los ojos que transmitirán al mundo lo acontecido allí. Además, por primera vez en una cumbre del G-20 los bloggers tendrán una relevancia especial y trabajarán también desde las instalaciones de la cumbre.
- El club de las primeras esposas: A la reunión de Londres también acudirán algunas de las esposas de los líderes mundiales. Está previsto que Michelle Obama acuda con su marido, así como Carla Bruni con Nicolas Sarkozy. No irán, sin embargo, el marido de Angela Merkel y Sonsoles Espinosa, mujer del presidente español.
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