Primeros pasos del Proyecto LIFE para unir zonas oseras oriental y occidental

León.-  Cuando está a punto de finalizar el periodo de invernada del oso de la Cordillera Cantábrica, desde la Fundación Oso Pardo se ha comenzado a trabajar en la tarea de crear corredores para unir las áreas oseras Oriental y Occidental

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(EFE)

Oso pardo salvaje en el Cordillera Cantábrica. Cuando está a punto de finalizar el periodo de invernada del oso pardo de la Cordillera Cantábrica, desde la Fundación Oso Pardo se ha comenzado a trabajar en la tarea de crear corredores para unir las áreas oseras Oriental y Occidental.

Jose Luis García Lorenzo, coordinador de proyectos de la Fundación Oso Pardo explicó a EFE que de las dos zonas oseras cantábricas, separadas desde mediados del siglo XX, la oriental, con una treintena de individuos, es la que tiene mayor peligro, por la escasa variabilidad genética.

Para comunicar esta zona con la occidental, de un centenar de ejemplares, se están dando los primeros pasos del proyecto LIFE, que comenzó este trimestre y tiene tres años de duración, en el que cual se invertirán 1,1 millones de euros, para comunicar ambos núcleos oseros.

"El paso la autovía del Huerna (A-66) limita la conexión de los osos orientales y occidentales a las zonas de túneles, que queremos complementar por la parte sur de Asturias, en los concejos de Aller y Lena, y por buena parte del norte de León, con numerosos municipios y buenos bosques en zonas incluso relativamente bajas como Barrios de Luna y Pola de Gordón".

El Proyecto LIFE denominado "Corredores de comunicación para el oso pardo cantrabrico" está ahora en sus primeros pasos con la firma de convenios de colaboración con los ayuntamientos del "Corredor interpoblacional", la edición de materiales, la programación de charlas a colectivos como cazadores o apicultores y el inicio de explicación en las escuelas.

" Queremos preparar el terreno social para que las gentes de este territorio vean la presencia del oso como un elemento de orgullo, como un patrimonio natural" afirmó García Lorenzo.

Financian el proyecto la Unión Europea, con el 75 por ciento del coste, y las fundaciones de Caixa Catalunya, Biodiversidad y Oso Pardo, y los muncipios afectados son ocho de León y cuatro de Asturias.

Para el representante de la Fundación Oso Pardo "ha cambiado profundamente la relación del hombre con el plantígrado desde las épocas de persecuciones de hace 30 o 40 años".

"Ahora la gente lo patriomonializa porque toma conciencia del privilegio de tenerlo; lo contempla como una oportunidad de desarrollo, como ha entendido, por ejemplo Somiedo, un municipio que antes estaba a la cola en desarrollo en su región y ahora se halla en nivel intermedio".

Jose Luis García Lorenzo se reunió con representantes de medios para presentar el libro "El Oso Cantábrico", editado con textos de diversos expertos y fotografías de Andoni Candela, fotógrafo navarro colaborador de la Nacional Geographic, que muestra una visión actual de oso y su territorio.

La mayor parte de las imágenes provienen de la zona del Alto Sil(León) y oeste de Asturias, siempre de ejemplares en libertad y observados desde larga distancia, para no molestar al oso.

También hay algunas imágenes de la zona occidental, los montes de Riaño(León) y zonas de Cantabria y Palencia, aunque allí recurre más al paisaje y entorno humano, pues el oso es muy difícil de localizar.

El libro ha sido financiado por la Fundación Biodiversidad y Caja Madrid y se vente en las librerías Artemis(León), Cervantes(Oviedo) Estudio(Santander) y en la web de Orix, y la recaudación se reinvertirá en acciones de conservación, según explicó García Lorenzo.

"El mensaje del libro -dijo- es positivo porque muestra el orgullo de tener osos en libertad por el territorio, orgullo por esos espacios de calidad, y por esta gente que ha sido artífice de un cambio de pensamiento, que ha descubierto que el oso es un factor positivo para el futuro"

Para García Lorenzo, desde el año 2000 hay cierto optimismo sobre el futuro del oso, porque éste crece en número, ha decaido el furtivismo, aunque preocupa un repunte tal vez eventual del uso de venenos.

"El furtivismo por disparos es realmente insólito (...) hoy nadie se ufanaría de haber disparado a un oso, y eso es algo que hemos conseguido entre todos, mediante la divulgación y la sensibilización".

"El oso -dijo- crece; hacemos un seguimiento de las poblaciones con crías y vemos que desde el año 2000 se recupera la zona osera. Los animales jóvenes alcanzan nuevos territorios; han avanzado incluso hasta las afueras de León (San Feliz de Torío).