López Otín considera que España tiene una "buena cantera" de investigadores

Oviedo.-  El catedrático en Bioquímica y Biología Molecular Carlos López Otín considera que España tiene una "buena cantera" de científicos y sostiene que los jóvenes investigadores son los "más inteligentes y preparados" de todos los tiempos.

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(EFE)

El catedrático de Bioquímica y Biología Molecular de la Facultad de Medicina de Oviedo, Carlos López Otín. EFE/Archivo

Un día después de recibir el Premio Nacional de Investigación Santiago Ramón y Cajal en Biología, el investigador y profesor en la Universidad de Oviedo ha hecho estas declaraciones en una entrevista a Efe.

Carlos López Otín nació en 1958 en Sabiñánigo (Huesca), un pueblo industrial dedicado al sector químico en el que, como comenta, les orientaban desde la escuela hacia este mundo porque "los químicos venían siempre de otras ciudades y los del pueblo eran los trabajadores".

Estudió Química en Zaragoza pero pronto decidió dedicarse a la Bioquímica porque se dio cuenta de que a dicha disciplina en sí "le faltaba algo que reflejara la vida".

"Siempre me había interesado la Medicina, mi abuelo era el practicante del pueblo", apunta López-Otín.

Tras desarrollar una labor investigadora en el Centro Ramón y Cajal de Madrid, que, como comenta, "coincide curiosamente" con el nombre del premio que ha recibido, llegó en 1987 a la Universidad de Oviedo, donde desarrolla su labor investigadora y docente en las facultades de Medicina, Química y Biología.

De esa época recuerda que se encontró un departamento de Bioquímica y Biología molecular, que había fundado el profesor Santiago Gascón, "perfectamente organizado", algo que distaba "de lo que se pensaba que se podía hacer en una ciudad de provincias".

Desde entonces, López Otín dice que la tecnología ha supuesto un gran cambio en el mundo investigador, lo que ha hecho que en departamentos como en el que trabaja existan grupos independientes dedicados a proyectos distintos.

El grupo que dirige el profesor López Otín en la Universidad de Oviedo, dedicado a la lucha contra el cáncer, cuenta con quince personas y está formado por jóvenes "muy competentes" a los que recomienda "compromiso, dedicación y esfuerzo".

El catedrático piensa que los jóvenes investigadores "no tendrán problemas" para investigar en España porque hay centros de elite en ciudades como Madrid y Barcelona, aunque "lamentablemente muchos de ellos se encuentran fuera de la universidad, que es realmente donde están las canteras".

López Otín ha desarrollado parte de su labor investigadora en el estudio de distintos mecanismos de progresión del cáncer, lo que le ha permitido descubrir sesenta genes humanos relacionados con la aparición de tumores, así como estudios de envejecimiento prematuro.

Desde enero se encuentra embarcado en la investigación relacionada con los genomas del cáncer, un proyecto "ambicioso" en el que España "ha logrado introducirse", y que se desarrolla en ocho países del mundo, como sostiene.

Este último trabajo, coordinado por el profesor Elías Campo del Hospital Clínico de Barcelona, tiene como objetivo el análisis del genoma de "unos quinientos pacientes" con leucemia para poder compararlo con pacientes "sanos".

"Estudiar mil genomas es una labor enorme si tenemos en cuenta que hasta 2009 sólo se ha podido completar el estudio de la secuencia de un genoma con un tumor".

El investigador apunta que "no hay una única cura contra el cáncer ni es eso lo que se persigue, porque la palabra cáncer es una palabra que engloba más de doscientas enfermedades", patologías distintas de las que "ya son curables" la mitad.

López Otín comenta que llegar "hasta aquí" ha sido "sacrificado", pero sostiene que es el camino que él escogió; una trayectoria que le ha puesto en las manos un premio que confiesa haber recibido "orgulloso y muy emocionado".