Venezuela se vengó de Estados Unidos con una gran victoria

Toronto (Canadá).-  La paliza de 15-6 que Estados Unidos le dio a Venezuela en el primer partido que ambos equipos disputaron dentro del Grupo C del Clásico Mundial de Béisbol dejo a la novena criolla con la adrenalina subida al máximo.

Por eso cuando se volvieron a enfrentar para asegurar quien de los dos equipos se quedaba como ganador del grupo, los peloteros venezolanos salieron al diamante del Rogers Centre de Toronto más mentalizados que nunca de que necesitaban la victoria para no sólo vengar una derrota sino para demostrar que son un equipo ganador.

Aunque el manejador de Venezuela, Luis Sojo, no quiso hablar con los periodistas antes del partido, debido a lo que consideró una cobertura negativa hacía el equipo, si estuvo concentrado en como tenía que mover los hilos para conseguir la victoria y lo hizo a la perfección.

Esta vez, Venezuela mostró un pitcheo ganador, una bateo oportuno, una gran defensa y sobre todo un orgullo especial de defender los colores de la "Vinotinto".

Con esta combinación explosiva, Venezuela no le dio opción a Estados Unidos a conseguir la victoria y tuvieron que aceptar la derrota por 5-3, que no sólo los dejaba segundos del grupo sino que deberán enfrentarse en el próximo partido, en la sede de Miami, nada menos que a Puerto Rico, el único equipo que llega invicto.

El que mejor definió lo vivido con la "Vinotinto" fue el cerrador estelar Francisco Rodríguez, que se quedó con el rescate después de sacar los tres últimos "outs" del partido.

"Por alguna razón siento que estoy en otro nivel", explicó Rodríguez. "Vestir la camiseta nacional de Venezuela, por alguna razón, es algo completamente diferente".

Rodríguez, que firmó un contrato por tres temporadas y 37 millones de dólares con los Mets de Nueva York, dijo que no sabía explicar, pero la sensación de jugar con tu país era completamente diferente.

"No estoy diciendo que no de siempre que salgo al montículo el máximo de mi rendimiento, pero es como que la adrenalina se eleva más, lo mismo que la presión", subrayó Rodríguez. "No se me debe mal interpretar.

Rodríguez reiteró que cada vez que se pone un uniforme diferente con los equipos que ha jugado como profesional, los defiende con un gran orgullo, pero frente a Estados Unidos y vistiendo la de Venezuela fue algo "muy especial".

El jardinero central Gregor Blanco que se fue de 5-3 con impulsada dijo que la victoria había sido muy especial e importante para todo el equipo.

"Hemos ganado a un gran equipo, uno de los mejores del mundo", comentó el jardinero de los Bravos de Atlanta. "Les mostramos que también podemos jugar béisbol y ganar partidos".

Gregor Blanco recordó que la mayoría de los relevistas que habían estado en el montículo en el primer partido nunca se habían enfrentado a las grandes figuras de Estados Unidos, pero en el segundo todo fue diferente.

"Aprendimos rápido la lección, esta vez no hicimos concesiones y por el contrario unimos fuerzas para no permitir que en la recta final nos remontasen el marcador", señalo Gregor Blanco. "Ahora debemos llegar a Miami con la mentalidad ganadora, pero también con un gran respeto para Holanda, que eliminó nada menos que a la poderosa novena de República Dominicana.

Por su parte, el torpedero estadounidense Derek Jeter reconoció que Venezuela hizo un excelente trabajo en todos los aspectos del juego y aunque Estados Unidos intentó la remontada en las dos últimas entradas, al final el pitcheo y gran defensa de sus rivales se lo impidieron.

"El lanzamiento que hicieron a segunda para sacarme en carrera fue algo magistral, simplemente no pude hacer nada", comentó Jeter. "Intentamos conseguir el empate en la última entrada, pero no fue posible, Rodríguez lanzó una gran pelota".

Antes que Rodríguez hiciese su trabajo otros cinco lanzadores habían maniatado al bateo explosivo de Estados Unidos, que vio como llegó a la parte baja de la octava entrada con sólo una carrera anotada por cinco de Venezuela.

El receptor Chris Iannetta iba a devolverle la esperanza a Estados unidos al pegar un jonrón de dos carreras contra el relevista Orber Moreno, pero eso fue todo lo que cedió el "bullpen" venezolano, que al igual que el resto del equipo se vistió de gloria deportiva.