General Motors y Chrysler se afanan en terminar sus planes de viabilidad

Washington.-  General Motors y Chrysler ultiman hoy los detalles de sus planes iniciales de reestructuración, que mañana presentarán ante el Departamento del Tesoro de EE.UU., tras saber que una Comisión Presidencial supervisará el rescate del sector.

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(EFE)

El consejo de administración de GM tenía previsto mantener una conferencia telefónica para revisar el plan de reestructuración que la empresa tiene que presentar a las autoridades federales. EFE/Archivo

Hoy, el consejo de administración de General Motors tenía previsto mantener una conferencia telefónica para revisar el plan de reestructuración que la empresa tiene que presentar a las autoridades federales.

Mientras, la empresa seguía embarcada en dos negociaciones paralelas.

Por un lado, con el sindicato United Auto Workers (UAW) para intentar conseguir concesiones de los representantes de los trabajadores que permitan reducir sus costes, especialmente en el capítulo de las obligaciones sanitarias que tiene con sus empleados.

Por el otro, GM está discutiendo con los tenedores de bonos para rebajar en miles de millones de dólares la carga financiera. General Motors tiene una deuda de 27.500 millones de dólares.

El acuerdo con Washington, que ha permitido a General Motors recibir de momento 9.400 millones de dólares en préstamos federales (más otros 4.000 millones que podría recibir tras presentar su plan de reestructuración), incluye el requisito de reducir sus cargas financieras.

Las negociaciones están siendo difíciles. El viernes, los representantes de UAW se retiraron de las negociaciones lo que amenazó con hundir las posibilidades de General Motors. Pero el domingo, UAW y GM reiniciaron sus conversaciones.

Tras la ruptura de las negociaciones, el periódico The Wall Street Journal dijo que General Motors estaba considerando declararse en quiebra y suspender pagos lo que crearía una nueva compañía.

Pero tras la reanudación de las negociaciones con UAW, General Motors aplaudió hoy la decisión del presidente estadounidense, Barack Obama, de crear una comisión especial para supervisar el rescate del sector del automóvil en Estados Unidos.

GM dijo a través de un comunicado que "aplaude la creación de una Comisión Presidencial del Automóvil" y expresó su deseo de mantener reuniones lo antes posible con los miembros del comité.

La cadena de televisión CNN señaló hoy que la comisión incluirá funcionarios de los departamentos de Tesoro, Trabajo, Transporte, Comercio y Energía, el Consejo Nacional Económico y la Agencia de Protección Medioambiental, entre otros.

Los trabajos de la comisión serán supervisados por el secretario del Tesoro, Tim Geithner, y el director del Consejo Nacional Económico , Larry Summers.

Mientras, Chrysler (que ha recibido 4.000 millones de dólares en préstamos y necesita al menos otros 3.000 millones) también sigue en negociaciones con UAW para conseguir concesiones.

El domingo, la empresa emitió un comunicado en el que confirmó que "la compañía está trabajando de forma diligente en su plan de viabilidad y lo presentará el 17 de febrero".

Ford, el segundo fabricante estadounidense de automóviles, ha dicho que no necesita en estos momentos ayuda financiera de las autoridades federales por lo que no tiene que presentar un plan de reestructuración al Departamento del Tesoro.

Sin embargo, Ford sí ha solicitado tener acceso a una línea de crédito en caso de que la situación del sector empeore de forma dramática.

General Motors y Chrysler deben presentar sus planes finales de reestructuración el próximo 31 de marzo. En caso de no hacerlo, o de que sus planes sean rechazados, las dos empresas se podrían ver forzadas a devolver el dinero prestado.