Alex Rodríguez dio positivo a esteroides, de acuerdo a informe periodístico

Nueva York (EEUU).-  Otra gran figura del béisbol profesional, Alex Rodríguez, el pelotero que más dinero gana en las Grandes Ligas, se ve envuelto en el consumo de esteroides, de acuerdo a un informe que publica hoy, sábado, la revista especializada "Sports Ilustred".

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(EFE)

Aunque, Rodriguez, tercera base de los Yanquis de Nueva York, que tiene un salario anual de 27 millones de dólares, ya había sido mencionado por el ex pelotero cubano José Canseco que había consumido esteroides durante su estancia con los Vigilantes de Texas, hasta ahora no se habían ofrecido datos concretos. EFE/Archivo

Aunque, Rodriguez, tercera base de los Yanquis de Nueva York, que tiene un salario anual de 27 millones de dólares, ya había sido mencionado por el ex pelotero cubano José Canseco que había consumido esteroides durante su estancia con los Vigilantes de Texas, hasta ahora no se habían ofrecido datos concretos.

De acuerdo a Sports Illustred, Rodríguez dio positivo a esteroides en la temporada del 2003, cuando las Grandes Ligas todavía no tenía prohibido el consumo de substancias anabolizantes.

Precisamente, ese mismo año, Rodríguez ganó el título de jonrones de la Liga Americana y fue también el que recibió el premio de Jugador Más Valioso (JMV), cuando estaba con los Vigilantes y ocupaba la posición de campo corto.

El trabajo realizado por Sports Illustred está basado en cuatro fuentes independientes y todas ellas aportan datos concretos sobre el positivo de Rodríguez, que cuando fue mencionado por Canseco, rechazó categóricamente la acusación y se negó ha hablar del asunto.

Rodríguez, de padres dominicanos, aparece en una lista de 104 peloteros que arrojaron resultados positivos al uso de drogas para estimular el rendimiento en el terreno de competición.

La lista fue generada tras pruebas realizadas por Grandes Ligas en el 2003 en coordinación con la Asociación de Jugadores, pero para mantenerse en el anonimato y sólo conocer el número de pelotero que se dopaban.

Con estos datos de las pruebas que se hicieron al azar también se trataba de establecer si era necesario establecer una política antidopaje mucho más estricta y severa de la que había en las grandes ligas hasta ese momento para detectar esteroides.

"Tendrán que hablar con el sindicato", dijo A-Rod, cuando le preguntaron en Miami sobre el asunto. "Sin comentarios", respondió a Rodríguez, que llegó a los Yanquis en febrero del 2004.

La política antidopaje de las Grandes Ligas prohíbe el uso de esteroides sin receta médica desde el 1991, pero no dictaba sanciones contra dicha violación en el 2003, cuando surgió el escándalo del caso de los ex laboratorios BALCO.

Más del cinco por ciento de los peloteros arrojó positivo en el sondeo del 2003. Un año después, las pruebas se establecieron como paso obligatorio, a la vez que se impusieron recursos para dictar sanciones.

Según dos de las fuentes, Rodríguez arrojó positivo al uso de Testosterona y otra sustancia conocida como Primobolan, también conocida bajo el nombre químico de methenolone, una sustancia que se consume vía inyección u oral con el propósito de mejorar la fortaleza y mantener la definición muscular.

El uso médico de Primobolan, sustancia que se refleja en los análisis de orina sólo por un breve periodo de tiempo, no está aprobado en Estados Unidos.

En cambio, la Testosterona puede ser usada legalmente siempre y cuando exista una receta médica, aunque ahora tampoco se permite ya a los peloteros bajo la nueva política antidopaje.

Rodríguez mostró todo su poder con el bate en la temporada del 2003 al conseguir su tercer título seguido de vuelacercas con 47 y su primera de tres menciones como Jugador Más Valioso.

Hasta el momento ni el director ejecutivo del Sindicato de Peloteros, Donald Fehr, ni el agente de Rodríguez, el todo poderoso Scott Boras, han querido responder sobre el contenido del informe periodístico y la implicación de su cliente.

Por su parte, el vicepresidente ejecutivo de Relaciones Laborales de las Grandes Ligas Rob Manfred dijo en comunicado de prensa que "Estamos trastornados con la noticia aparecida en Sports Illustrated".

Manfred destaca en el comunicado que las pruebas antidopaje que se hicieron en el 2003 no tenían carácter punitivo y eran anónimas a todos los efectos.

"De ahí que no podemos comentar sobre la veracidad del reporte en lo que respecta al jugador nombrado en el mismo", señaló Manfred.

El directivo de las Grandes Ligas reitero que en base en esos resultados fue como su organización trabajo de inmediato en dar soluciones válidas al problema.

"Basándose en los resultados de las pruebas del 2003, las Grandes Ligas establecieron las pruebas obligatorias antidopaje al azar en el 2004 con castigos para los positivos", destacó Manfred.

"Las Grandes Ligas y la Asociación de Jugadores han mejorado ese programa de pruebas en varias ocasiones convirtiéndolo en estos momentos en el programa más riguroso de todos los deportes profesionales", defendió Manfred. "El programa prohíbe estimulantes tales como anfetaminas, al igual que los esteroides".

Sin embargo, Manfred se mostró preocupado por el informe periodístico, ya que según él, "dicho comportamiento constituye una seria violación al acuerdo entre las partes".

"El béisbol de Grandes Ligas, bajo el liderato del Comisionado Selig, se mantiene comprometido a la eliminación del uso de sustancias para mejorar el rendimiento en el deporte", subrayó Manfred en el comunicado, en el que defiende el papel jugado por el comisionado del béisbol Bud Selig.

"Como el Comisionado ha dicho, continuaremos haciendo todo lo que esté a nuestro alcance para eliminar el uso de dichas drogas y proteger la integridad de nuestro programa", concluyó Manfred.

Sin embargo, la actuación del comisionado y el sindicato en cuanto a la política antidopaje dentro del béisbol profesional llegó después que el Congreso de Estados Unidos los amenazó con tomar acciones legales y por ley si ellos mismos no establecían una política más estricta y punitiva contra el consumo de substancias prohibidas.

De nuevo, Canseco con sus libros "Juiced: Wild Times, Rampant 'Roids, Smash Hits, and How Baseball Got Big" y "Reivindicado: Grandes Nombres, Grandes Mentirosos y la Batalla para Salvar al Béisbol" ha vuelto a demostrar que se adelantó a todos los acontecimientos sobre el dopaje y que su conocimiento del mismo es muy grande y profundo.