Los cabecillas del golpe que derrocó a Stroessner reciben menciones

Asunción.-  La celebración del vigésimo aniversario de la caída de la dictadura de Alfredo Stroessner se cerró hoy en el Congreso con la entrega de menciones a varios militares retirados que contribuyeron a la llegada de la democracia a Paraguay.

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(EFE)

El presidente de Paraguay, Fernando Lugo (d), durante un acto en el Congreso, en Asunción, donde fue condecorado un grupo de ex militares paraguayos que lideró el derrocamiento de la dictadura de Alfredo Stroessner.

El acto, al que asistió como invitado especial el jefe de Estado, Fernando Lugo, incluyó la entrega de diplomas a los protagonistas de la insurrección iniciada la noche del 2 de febrero de 1989 y que concluyó la madrugada siguiente con la dimisión de Stroessner.

La celebración, a la que también asistieron el vicepresidente del país, Federico Franco, y el presidente del Congreso, Enrique González Quintana, tuvo como orador principal al vicealmirante retirado Eduardo González Pettit, quien se desempeñaba como comandante de la Armada cuando se ejecutó el golpe de Estado.

El ex militar destacó que el alzamiento "fue llevado a cabo no en contra de determinadas personas sino contra el sistema corrupto y perverso" sostenido por Stroessner, quien gobernó con mano dura el país durante 35 años, de 1954 a 1989.

González Pettit consideró además que el éxito del golpe de Estado se debió a la "excelente preparación del personal participante, a la minuciosa planificación y reconocimiento de los objetivos y a la sorpresa".

No obstante, reconoció que ese último factor no tuvo el resultado esperado, pues recordó que se filtraron rumores a nivel gubernamental de un posible golpe de Estado.

Esa situación, según recordó el vicealmirante retirado, obligó a adelantar las acciones, inicialmente fijadas para la madrugada del 3 de febrero.

Por otra parte, González Pettit mencionó como uno de los logros más importantes de la conspiración la instauración de "una total libertad de expresión, la cual involucra un mayor control sobre las actividades, tanto oficiales como privadas".

Entre tanto, citó como aspectos negativos del proceso democrático "la persecución que sufrieron las fuerzas públicas, principalmente las Fuerzas Armadas. Muy perjudicadas por la falta de la aplicación de la ley del servicio militar obligatorio y los drásticos recortes de sus presupuestos".

"Esto nos dejó en un estado de indefensión muy crítico, creando la situación propicia para el surgimiento de importantes bandas organizadas de delincuentes. Igualmente nuestras fronteras quedaron despobladas e inseguras", aseveró el ex militar.

González Pettit señaló, no obstante, que con la llegada de Lugo al poder en los comicios generales del 20 de abril pasado, que puso fin a 61 años de Gobierno del Partido Colorado, principal soporte político de la dictadura "stronista", esa situación ha comenzado a reestructurarse.

Otro de los ex cabecillas del golpe que participó en el acto de recordación fue el general retirado Lino Oviedo, que tuvo a su cargo la misión de ingresar al cuartel donde se había refugiado Stroessner para exigirle la dimisión.

Oviedo recordó durante una entrevista concedida recientemente a Efe que "cualquier traspié que cometía un ciudadano en contra del accionar de Stroessner, de su administración, que pueda opinar diferente, era un candidato, ya sea a la cárcel, el exilio o a la desaparición".

Stroessner fue derrocado por un cruento golpe de Estado encabezado por su consuegro, el general Andrés Rodríguez (1923-1997), quien asumió un Gobierno provisional antes de ser elegido presidente en comicios libres.

El dictador se asiló en Brasil, donde residió hasta su muerte, en agosto de 2006, a los 94 años.

Rodríguez, quien era el hombre fuerte de la milicia paraguaya y estaba investigado por las autoridades antidrogas de Estados Unidos, condujo la transición a una Asamblea Constituyente, que en 1992 promulgó la nueva Constitución y la elaboración del Código Electoral.

La celebración del vigésimo aniversario de la llegada de la democracia incluyó además diversos actos culturales, entre ellos presentación de documentales y libros vinculados al hecho, así como un homenaje rendido por Lugo a los caídos, ayer en el Panteón de los Héroes.