Malia y Sasha Obama disfrutan de su propia fiesta de investidura

Washington.-  Malia y Sasha, las hijas del presidente electo, Barack Obama, disfrutaron hoy de su particular fiesta de investidura al asistir a un concierto en el que cantaron y bailaron al son de canciones de Miley Cyrus y los Jonas Brothers.

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(EFE)

Fotografía del 11 de enero de 2009 del presidente electo de EE.UU., Barack Obama (d), junto a su esposa Michelle y sus hijas Malia (i) y Sasha, quienes disfrutaron hoy de su fiesta de investidura con un concierto de Miley Cyrus y los Jonas Brothers. EFE/Archivo

El concierto, organizado por la que será a partir del martes la primera dama de EE.UU., Michelle Obama, y por Jill Biden, la esposa del próximo vicepresidente, Joseph Biden, en honor a las familias de militares, lo siguieron miles de niños en el Verizon Center, de Washington.

Entre nervios e ilusión, los niños que asistieron al concierto "We Are The Future" (Somos el futuro) disfrutaron de 90 minutos de diversión y entretenimiento, en el que estrellas como Miley Cyrus, protagonista de la serie "Hannah Montana", los Jonas Brother, Demi Lovato, Bow Wow y Corbin Bleu los deleitaron con su música.

La mayoría de los niños estaban allí por Miley Cyrus y los hermanos más venerados en estos momentos en EE.UU. y en medio mundo, Nick, Joe y Kevin de los "Jonas Brothers", como Mia y Talia, dijeron a Efe que estaban "muy ilusionadas" por ver a sus ídolos junto a otros miles de niños.

El concierto arrancó con el himno nacional, interpretado por un niño, como no podía ser de otra manera en una noche en la que los más pequeños eran los protagonistas, seguida de una espectacular Miley Cyrus, que salió al escenario vestida de gala y con el pelo recogido.

Mientras la joven cantante se cambiaba en el backstage, el actor Jamie Foxx entretuvo a los niños, y apenas unos minutos después volvió a aparecer la intérprete de "Hannah Montana", si bien esta vez vestida con su atuendo habitual y al estilo roquero.

En una de sus canciones, la joven, que cantó por primera vez "The Climb", invitó a su padre en la vida real y en la serie, Bill Ray Cyrus, a subir al escenario para entonar juntos un dueto.

Malia, de diez años, y Sasha, de siete, disfrutaron especialmente de las canciones de Miley, ya que son sus principales fans, según afirmó en varias ocasiones su padre.

Entre acto y acto, los niños pudieron participar en juegos como un trivial con preguntas sobre ex presidentes de EE.UU., en los que podían ganar una camiseta con el rostro de Obama.

Quizá la nota más divertida fue el concurso, en formato de dibujos animados, que protagonizaron tres perros ansiosos por mudarse con Malia y Sasha, a quienes su padre prometió una mascota al llegar a la Casa Blanca.

El concierto solo fue interrumpido en una ocasión, cuando Jill Biden y Michelle Obama se subieron al escenario.

"Ustedes son el futuro de esta gran nación", afirmó la próxima primera dama, quien aprovechó la ocasión para pedir a los niños que ellos también ayuden a mejorar su entorno.

"Necesitamos que todos los estadounidenses ayuden a sus comunidades, incluso los jóvenes", dijo.

Michelle también se dirigió a los militares que se encontraban con sus hijos en el Verizon Center, al asegurarles que "Barack, Malia, Sasha y yo agradecemos tanto el sacrificio y el servicio de nuestras familias militares para mantener a nuestra nación a salvo".

Un momento especialmente emotivo fue cuando la actriz Queen Latifah invitó al escenario a las familias de miembros de la Brigada 261 de la Guardia Nacional, destinada en Irak, que aparecieron por sorpresa en las gigantes pantallas a través de una videoconferencia.

En un día en el que EE.UU. conmemora el cumpleaños de Martin Luther King, quien hoy tendría 80 años, el cantante Usher rindió un homenaje al líder afroamericano de los derechos civiles.

La tensión en el Verizon Center iba aumentando conforme avanzaba el concierto y se acercaba el gran momento de la noche para muchos niños, y sobre todo niñas: la actuación de los Jonas Brothers.

Cuando finalmente subieron al escenario, el Verizon Center fue un hervidero de gritos y llantos, a los que tampoco se pudieron resistir Malia y Sasha, y ni siquiera su madre, que bailaba con sus hijas en primera fila al ritmo de las canciones de los cantantes adolescentes.