Buscan bajo toneladas de tierra a 30 desaparecidos tras un derrumbe en Guatemala

Guatemala.-  Los cuerpos de socorro de Guatemala trabajaban hoy a marchas forzadas para hallar vivos a los desaparecidos a causa del gigantesco derrumbe de un cerro que ocurrió el domingo en el norte del país y ha causado ya 34 muertes.

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Las últimas cifras oficiales, proporcionadas por Hugo Arbizú, portavoz de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), señalan que hasta el mediodía (18:00 GTM) habían sido rescatadas con vida 21 personas, que fueron trasladadas a hospitales públicos de la zona con heridas de gravedad.

"Vamos a seguir en las tareas de rescate, pero conforme pasa el tiempo cada vez se escapan las esperanzas de encontrar alguna persona con vida", relató a medios locales uno de los 180 socorristas que forman las brigadas de socorro.

El derrumbe se produjo este domingo, cuando más de un centenar de campesinos, ignorando una prohibición de paso establecida desde mediados de diciembre, cruzaron el cerro "Xicut", ubicado en el kilómetro 205 de la carretera sin asfaltar que une a las poblaciones de San Cristóbal y Chicamán, en el norteño departamento de Alta Verapaz.

Como producto de las intensas lluvias que azotaron el norte de Guatemala durante el último trimestre del año pasado, el cerro "Xicut" sufrió un derrumbe parcial el 15 de diciembre pasado, que se cobró entonces la vida de dos personas.

Tres personas más fueron declaradas desaparecidas en ese primer derrumbe.

Debido a la peligrosidad del lugar, las autoridades cerraron el paso para evitar nuevas tragedias, pero los campesinos ignoraron esta medida y lo cruzaron a pie.

Según narraron algunos supervivientes, miles de toneladas de tierra, rocas y árboles cayeron sobre los labriegos en cuestión de minutos al llegar a la mitad de la montaña, bajo la que quedaron soterrados.

El presidente de Guatemala, Álvaro Colom, lamentó hoy la tragedia, pero resaltó que "los muchachos (los jornaleros) no hicieron caso y pasaron por un lugar que estaba cerrado".

Colom explicó que ha designado a su vicepresidente, Rafael Espada, quien la víspera visitó el área, para que se haga cargo de la ayuda a las familias de los afectados por el alud.

Según el secretario de Coordinación Ejecutivo de la Presidencia, Salvador Gándara, el tramo carretero había sido declarado intransitable por los geólogos desde mediados de diciembre pasado debido al primer derrumbe.

Las autoridades habían colocado un cerco y una advertencia que prohibía el paso por esa vía, aseguró.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Sismología (Insivumeh), la zona del derrumbe es atravesada por ramificaciones de las fallas de Chixoy y Polochic, lo que hace más inestable el terreno.

Cabañas aseguró que las brigadas continuarán en la zona hasta que se localice a los desaparecidos, aunque los socorristas han advertido que continúan cayendo tierra y rocas desde lo alto de la montaña y que la búsqueda puede tener que suspenderse.

En la misma área donde ocurrió el derrumbe, la empresa japonesa "Tokura" suspendió el domingo pasado los trabajos de ampliación de una carretera debido a un alud que cubrió más de un kilómetro y medio de la vía.

El ecologista Alex Córdova, quien trabaja para "Tokura", dijo a la prensa que los trabajaos se habían dificultado en los últimos días debido a la filtración de agua y lo agrietado del cerro, por lo que luego del gigantesco derrumbe, decidieron suspender la obra.

"No nos imaginábamos la magnitud del derrumbe. Es impresionante", acotó el ministro de Comunicaciones e Infraestructura, Luis Alejos.

El ministro aseguró que su cartera está preparada para habilitar la carretera, aunque aclaró que primero esperarán a que los geólogos concluyan una evaluación para determinar cuándo se puede enviar de nuevo la maquinaria a trabajar al lugar.