IU apura las negociaciones pero no se vislumbra un candidato de consenso

Madrid.-  IU tiene seis días para despejar las dudas y nombrar su coordinador general en el Consejo Político del domingo, pero las distintas corrientes de la formación quieren apurar las negociaciones e intentan restar importancia a sus discrepancias alegando que lo importante es nombrar una dirección plural.

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(EFE)

La dirigente Inés Sabanés, antes de la rueda de prensa que se celebró en la sede de Izquierda Unida (IU) para informar de los preparativos de la reunión que en el plazo de algo más de un mes deberá nombrar al sustituto de Gaspar Llamazares.

Han pasado tres semanas desde que IU cerrara en falso su Asamblea Federal, con un acuerdo en el proyecto político de cara al futuro pero con nada menos que cinco candidaturas -Cayo Lara, Eberhard Grosske, Joan Josep Nuet, Juan Manuel Sánchez Gordillo y Haizea Miguela- para sustituir a Gaspar Llamazares.

Un período en el que sólo se ha avanzado en la constitución de un "G-14" con representantes de las cinco listas para preparar el Consejo Político, a pesar de que los contactos y las negociaciones entre todas las sensibilidades han sido constantes, según ha podido recabar Efe entre los miembros de las diferentes corrientes.

La portavoz de IU-Abierta, Inés Sabanés, apuesta por mantener el candidato que presentaron durante la Asamblea, el dirigente balear Eberhard Grosske, que durante la madrugada del cónclave parecía contar con el apoyo de la Tercera Vía, la "bisagra" que probablemente determinará el resultado este domingo.

Sin embargo, unas horas después ese respaldo se fue diluyendo, y aún a estas alturas la Tercera Vía sigue sin decidirse a mantener el apoyo a Grosske o decantarse por el candidato del PCE, Cayo Lara.

De hecho, esta corriente -formada principalmente por miembros de las federaciones de Madrid, Aragón y Cataluña- se reunió el pasado viernes para analizar qué postura tomar frente al Consejo Político, y la conclusión fue no decantarse por ninguno, sino apurar el tiempo para buscar un acuerdo sobre un líder que supere la "dinámica de bloques" y garantice la pluralidad en la dirección que se nombre.

Nuet, tras la reunión, afirmó que durante esta semana hablarán con las demás sensibilidades para ver qué modelo de dirección presentan y ver si es posible el acuerdo; Adolfo Barrena, también de la Tercera Vía, no ve imposible que se llegue a ese consenso, porque las corrientes ya demostraron durante la Asamblea que pese a las diferencias eran capaces de pactar un documento político para el futuro.

"Vamos a 'rematar la faena' y tratar de convencer al resto para llegar al día 14 con una propuesta única; sería mucho más enriquecedor si el Consejo Político debate sobre una propuesta de dirección elaborada y trabajada y no sobre posiciones diferenciadas", invitó Barreda.

Todo esto hace pensar a algunos de los miembros de IU-Abierta que dentro de la Tercera Vía hay distintas inclinaciones y, así, parece que las federaciones de Madrid y Aragón darían su apoyo a Lara, mientras que los catalanes se decantarían más por Grosske.

Sabanés, en todo caso, pide a las corrientes que se aclaren, y asegura que IU-Abierta sí tiene muy definidos sus objetivos: defender el proyecto político que se aprobó en la Asamblea, compromiso de trabajo, voluntad de participar y, sobre todo, lealtad.

Mientras tanto, el PCE mantiene que Cayo Lara debería ser el coordinador general, dado que su candidatura fue la más votada durante la Asamblea Federal de las cinco que se presentaron.

Willy Meyer, desde esta corriente, sostiene que lo "lógico" es que Lara lidere IU al contar con mayor respaldo, y que en torno a él todas las corrientes acuerden una dirección colegiada, con representación proporcional de cada una de las candidaturas.

Afirma Meyer que "hasta ahora había un coordinador que ponía su dirección y ahora será al revés; es una diferencia sustancial", concluye.