El Barrio de las Letras, donde perderse es todo un placer

MADRID.-  Te invitamos a un viaje a través del tiempo. Vamos a recorrer el Barrio de las Letras, uno de los más tradicionales de Madrid. Residencia en su día de los grandes escritores del Siglo de Oro, hoy es una zona de moda donde hoteles de diseño, tiendas, teatros, restaurantes, bares o galerías de arte están a tu alcance y todos muy cerca entre sí.

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Cada año, más de seis millones de personas visitan esta zona de Madrid. El Paseo del Prado es el eje de uno de los costados de este barrio, que recorre la calle de Atocha hasta casi llegar a la Puerta del Sol. Lo mismo hace por el otro lado la carrera de San Jerónimo, por la que llegamos a la Plaza de las Cortes y, así, de nuevo al Prado. Quizás Góngora, Tirso de Molina o Calderón de la Barca, que un día vivieron aquí, no podrían reconocer hoy las calles del Príncipe, Fúcar o San Agustín, donde perderse es todo un placer.

De día, podemos descubrir tiendas de ropa y complementos como Krysopeya (Doctor Fourquet, 7) y La Pintana (Lope de Vega, 3), además de locales alternativos como Viva la Vida (Huertas, 57), donde encuentras comida vegetariana al peso. De noche, hay algunos bares o clubes imprescindibles para todo noctámbulo que se precie. La Fídula (Huertas, 57), con actuaciones de música clásica en directo o La Boca del Lobo (Echegaray, 11), son siempre buenas opciones.

En las calles que recorrieron escritores españoles como Quevedo, Lope de Vega, o Cervantes, encontrarás librerías como La Celestina (Huertas, 21) donde se acumulan páginas y páginas de sus obras más famosas. Seguimos nuestro recorrido por la calle Huertas, donde los versos del autor de Don Juan Tenorio acompañan nuestros pasos con fragmentos de obras de aquella época grabados en el suelo.

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Mientras pasea, uno se imagina a aquellos escritores charlando en una de las muchas terrazas que podemos encontrar en la Plaza de Santa Ana, junto al Teatro Español, donde hoy hay estatuas en homenaje a Calderón de la Barca y Federico García Lorca. Bares de tapeo o cafés, como La Suiza con sus riquísimos pasteles, pueblan la plaza, que sirve de lugar de encuentro a aquellos que visitan la zona. Es especialmente recomendable subir a la terraza del antiguo Hotel Victoria, pues por la noche podremos disfrutar desde allí de magníficas vistas de la ciudad.

La proximidad con el Paseo del Prado y sus museos, como el Reina Sofía, el Thyssen o Caixa Forum, ha propiciado que en los últimos años numerosas galerías de arte hayan elegido esta zona para abrir sus puertas. La casa de Lope de Vega, donde el escritor vivió sus últimos 25 años y teatros como el de la Comedia o el Ateneo completan la oferta cultural de la zona. Por último, La Fábrica, que cada junio organiza el festival de fotografía PhotoEspaña, es el lugar perfecto para buscar obras de fotógrafos y artistas visuales.

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Un clásico de Santa Ana...

Para tomar tus propias instantáneas, puedes acercarte a comprar una buena cámara a Lomography Shop. Quizás, con imágenes, consigas reflejar la identidad del barrio. Esa fusión de lo moderno con lo viejo. Esa mezcla de edades, formas y procedencias. De los comercios de ultramarinos de toda la vida a tiendas de música como La Metralleta (Ángel, 4), que tiene tanto CDs como vinilos en su amplia colección.

Si entre tanto tienes hambre, te recomendamos que te pases por tabernas como Casa Alberto (Huertas, 18), o si eres vegetariano, Al Natural (Zorrilla, 11), que ofrece comida de autor en un ambiente 'especial'. Por último, si lo que buscas es un lugar para cenar después de ir a uno de los muchos teatros de la zona, te sugerimos La Cueva de Gata (Moratín, 19) que todos los jueves tiene un menú-teatro que incluye, como ellos dicen, atracciones 'comicodramaticofestivas'.

Y como broche final, después de disfrutar una bonita noche en alguno de los locales que antes te mencionábamos, nunca está de más esperar a que llegue el nuevo día en uno de los hoteles más chic de Madrid. Por ejemplo, el Alicia Room Mate (Prado, 2) en el que Pedro Almodóvar rodó escenas de su película 'Hable con ella'. Un genio contemporáneo que, como hicieron sus predecesores, ilumina la historia de este barrio.