Gallardón deja a los Publívoros en ayunas

"La noche de los publívoros", evento de origen francés que ha recorrido más de cien ciudades de todo el mundo y que hoy recalaba en Madrid, ha tenido que ser suspendida por la reciente ola de cierres de locales ordenada por Alberto Ruiz-Gallardón.

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En 1981 Jean Marie Bursicot, apasionado de la comunicación comercial y coleccionista de anuncios y carteles cinematográficos, puso en marcha un evento-espectáculo de seis horas de duración en el que los asistentes podían disfrutar de una sesión de spots aderezados con alguna que otra actuación musical, concursos y degustaciones de productos donados por los patrocinadores. Una iniciativa que, además de su dimensión lúdica, buscaba concienciar a los actores del medio publicitario y a las instituciones del valor cultural de los anuncios y de la necesidad de conservarlos para el futuro.

La fiesta, que lleva por título "La noche de los publívoros" y que está pensada para todos aquellos, profesionales o no de ese sector a quien le gusten los anuncios, lleva años celebrándose con gran éxito por ciudades de todo el mundo. Bueno, por todo el mundo excepto por las ciudades Españolas donde no se puede decir que haya corrido muy buena suerte.

En declaraciones recientes a Silvia Ocaña, redactora de la revista Anuncios, Bursicot narraba cómo su experiencia en nuestro país no ha sido muy satisfactoria. Si bien hace unos años se celebraron fiestas en Bilbao y Madrid lo cierto es que lo hicieron sin mucha repercusión y sin ninguna continuidad porque Bursicot no consiguió contactar con un productor que entendiera el enfoque que pretendía darle al espectáculo.

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Comunicado de la organización de "La noche de los Publívoros" anunciando la suspensión del acto.

Cuando finalmente lo encontró en Barcelona, el sujeto desapareció sin dejar rastro y suponemos que con buena parte del dinero. Por si eso no fuera suficientemente desolador, ahora que había conseguido traerlo a Madrid, la locura desatada en las altas esferas y el Ayuntamiento de la capital por la muerte del joven Álvaro Ussía a las puertas de un local nocturno ha hecho que la fiesta sea suspendida a consecuencia del cierre de la sala La Riviera.

Así pues, los publívoros se quedan sin fiesta. Sin anuncios, sin concursos, sin degustaciones y sin el concierto de Pignoise que iba a animar la velada. Tal vez puedan desquitarse a principios del año que viene, fecha en la que la organización ha declarado que tiene pensado intentarlo de nuevo. Todo depende de lo que decida la autoridad ¿competente?.