El Justicia insiste en la necesidad de evitar el aislamiento para reducir los malos tratos

Zaragoza.-  El Justicia de Aragón, Fernando García Vicente, ha insistido hoy en la necesidad de evitar el aislamiento, porque las mujeres aisladas sin una red familiar o social próxima son muchos más vulnerables.

ampliar foto

En el Día Internacional de lucha contra la Violencia de Género, García Vicente ha pedido a toda la sociedad que no sea neutral ante la violencia doméstica, condene al maltratador y al mismo tiempo apoye a las mujeres víctimas de esta lacra.

El Justicia ha recordado que según un informe encargado por la Institución en siete de cada diez casos el riesgo de muerte para una mujer víctima de violencia en su relación de pareja ha permanecido oculto a la sociedad.

"Se trata de homicidios silenciosos y opacos ante los cuales la sociedad no ha podido responder, bien porque no había agresiones anteriores, y si las había la víctima las toleraba con el fin de mantener el universo familiar, o bien porque se mostraba ambivalente, denunciado unas veces y perdonando otras".

Para romper el silencio de estas mujeres, según el informe del Justicia, es importante el apoyo del entorno más próximo: familiares, parientes, amigos, compañeros de trabajo, médicos de atención primaria o asistentes sociales.

Asimismo, ha señalado que cuando las víctimas son personas mayores y cuidadoras únicas de una pareja muy deteriorada física y psíquicamente es importante tener la posibilidad de tomarse un respiro en las tareas cotidianas, salir a la calle y participar en actividades con otras personas,

En casos de víctimas que callan u ocultan la realidad para mantener una falsa unidad familiar se propone estudiar la creación de una "denuncia puente", una fórmula que permita a la víctima protegerse sin romper su universo doméstico, al menos, en un primer momento.

En todos los casos de riesgo, el Justicia de Aragón sugiere autoprotegerse y para ello la Institución ha editado un Manual de Autoprotección disponible en la web "www.eljusticiadearagon.es".

A la hora de plantear las medidas de prevención y lucha contra la violencia doméstica, el Justicia llama la atención del escaso efecto disuasorio que tiene la pena entre los agresores, ya que dos terceras partes de los agresores homicidas presentan un alto grado de aceptación de lo sucedido como inevitable.

Además, en una de cada tres muertes domésticas analizadas, el hombre se suicida o lo intenta, y en un porcentaje similar se entrega.