Los trabajadores de Budelpack pueden gestionar el paro pero sigue el encierro por las deudas

Talavera de la Reina (Toledo).-  Los empleados de Budelpack en Talavera de la Reina han recibido hoy de la empresa los documentos para tramitar el paro pero continuarán su encierro en la fábrica hasta cobrar el mes de octubre y poder recuperar el plan de pensiones que está retenido por impago de Budelpack al banco.

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(EFE)

Trabajadores de la fábrica que la multinacional holandesa Budelpack tiene en Talavera de la Reina, cortan la calle en el polígono de Torrehierro durante el sexto día de su encierro en la factoría para exigir a la compañía que liquide "con dignidad" y les facilite los documentos para acceder a la prestación por desempleo.

Los 138 trabajadores de Budelpack en el polígono industrial "Torrehierro" cumplen hoy su sexto día de encierro en la factoría para exigir que la empresa, dedicada a productos de higiene personal y que presentó hace medio año concurso de acreedores, les trate "con dignidad".

Los trabajadores iniciaron su encierro el jueves y piden que la multinacional holandesa les pague el mes de octubre y el finiquito, y les permita recuperar el plan de pensiones que está retenido porque la empresa adeuda 8.000 euros al banco, ya que los documentos del paro han llegado a las 08:30 horas de esta mañana.

Los miembros del comité de empresa y los trabajadores han explicado a EFE que están "más animados cada día", sobre todo por las múltiples muestras de solidaridad y apoyo recibidas en las últimas horas, incluyendo al alcalde de Talavera, José Francisco Rivas, que les telefoneó esta mañana.

"Nos ha llamado el alcalde solidarizándose con nosotros y diciéndonos que estemos tranquilos y que mantengamos la calma", ha comentado el secretario del comité de empresa, José Luis Molina, añadiendo que también han recibido apoyos de compañeros de otras factorías de Budelpack como la desaparecida en Sant Just Desvern (Barcelona).

Los abogados que defendieron, con éxito, a los trabajadores de Barcelona son los que trabajan ahora para los 138 empleados de Talavera de la Reina y los que han recurrido la sentencia dictada por el juez de lo Mercantil de Toledo respecto al concurso de acreedores.

Molina explica que "los compañeros de Sant Just nos han dado todo su apoyo y nos dicen que la Justicia en Castilla-La Mancha es más débil que en Cataluña porque allí se dictó el pago de 45 días por año trabajado y los sindicatos les apoyaban, y aquí la sentencia nos da solamente 20 días por año trabajado y no tenemos apoyo de los sindicatos".

En este sentido, los trabajadores de Budelpack afiliados a los sindicatos enviaron ayer su baja a UGT y CCOO -como habían anunciado- por la falta de apoyo obtenido desde que contrataron al despacho de abogados que había defendido a los compañeros de San Just Desvern.

Molina ha subrayado que confían en los abogados que les defienden y ha añadido que la relación con los sindicatos ha terminado porque "nosotros ya no existimos para ellos, nos hemos dado de baja, y ellos tampoco para nosotros".

Como cada mañana, los trabajadores han cortado la vía a la altura de la fábrica y han hecho una fogata en el exterior, mientras siguen en su encierro junto a miles de frascos de colonias y desodorantes apilados en el almacén e inmensos bidones de alcohol preparados para una producción que cesó hace medio año.

Muchos trabajadores de esta empresa rondan ahora los cincuenta años, llevan en esta factoría -anteriormente Unilever- la mayor parte de su trayectoria laboral y ven su futuro con incertidumbre.