Un congreso reclama el apoyo de los poderes públicos para un sector con futuro y pocas ayudas

Toledo.-  El futuro del turismo industrial o de empresas en España y en Europa depende, en gran medida, del apoyo que los poderes públicos presten a esta nueva modalidad de turismo, que tiene mucho futuro, pero "muy pocas ayudas".

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(EFE)

El director de Turismo de la Dirección General de Empresa de la Comisión Europea, Pedro Ortún, durante su intervención ayer en el II Congreso Europeo de Turismo Industrial, en Toledo.

Ésta es una de las conclusiones del II Congreso Europeo de Turismo Industrial, celebrado durante los tres últimos días en Toledo, con la asistencia, entre otros, del responsable de Turismo de la Comisión Europea, Pedro Ortún, quien ha comprometido el apoyo de este organismo para la celebración de la I Semana Europea de las Visitas a Empresas, que se desarrollará del 6 al 14 de mayo de 2009.

La celebración de esta semana es, a juicio del profesor de Análisis Geográfico Regional de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED), Antonio Zárate, "un primer paso en la necesaria colaboración" que los poderes públicos deben prestar a este tipo de turismo, que, más allá de la mera actividad económica, "es un elemento más para crear identidad europea".

Así, ha señalado que "cuando viajamos fuera de nuestro país a visitar una empresa, aprovechamos también para visitar una iglesia, un territorio y se busca hablar con la gente".

En este sentido, "el turismo industrial es una magnífica oportunidad para entrar en contacto con los lugareños, para ver que somos mucho más parecidos de lo que, a veces, nos creemos y reforzar así el sentimiento de europeidad", ha argumentado el profesor Zárate.

También ha hecho hincapié en que el turismo industrial encaja muy bien con las perspectivas del hombre moderno, "que desea conocer la relación existente entre el proceso de fabricación de un producto y el territorio que posibilita dicha actividad" y ha puesto como ejemplo las Rutas del Vino, la Cerámica o la Minería, que se están llevando a cabo con éxito en varios países de Europa.

En este punto ha destacado que el enoturismo es el ejemplo más claro del éxito del turismo industrial en Europa y en España, si bien ha abogado por hacer de las visitas a empresas "un producto integrado, no aislado".

Y ha puesto como ejemplo que, en la provincia de Toledo, se puede compaginar la visita a la fábrica aeronáutica "Airbus", de Illescas, con la visita al Parque Arqueológico de la ciudad vecina de Carranque.

El turismo industrial supone adentrarse en "el mundo de la imaginación, es un desafío a la creatividad de las grandes y pequeñas empresas, a los actores del turismo y una exigencia a los poderes públicos, que deben apoyar esta nueva alternativa de turismo en beneficio de toda la sociedad", ha aseverado Zárate.

Y ha apostillado que, "hasta aquí, hemos llegado sin ningún presupuesto", pero ha llegado la hora de que las administraciones se involucren económicamente en esta nueva modalidad de turismo, para la que puede resultar también muy eficaz la colaboración Universidad-empresa.

Además, Zárate ha resaltado que, durante este II Congreso Europeo de Turismo Industrial, se ha tratado sobre la importancia de la celebración de jornadas de puertas abiertas en las empresas, "como la mejor manera de que éstas se hagan visibles socialmente y, de esta forma, propiciar las ventas de sus productos".

El II Congreso Europeo de Turismo Industrial ha sido organizado por el Consejo Superior de Cámaras de Comercio, Industria y Navegación de España, la Asamblea de Cámaras Francesas y la Cámara de Comercio e Industria de Toledo.