Zapatero apuesta por una reforma a fondo porque "no valen paños calientes"

Las Palmas de Gran Canaria.-  El jefe del Ejecutivo José Luis Rodríguez Zapatero, ha advertido hoy de que "no valen paños calientes" contra la crisis y ha apostado por una reforma a fondo del orden financiero mundial, con una respuesta "concertada, fuerte y determinada" desde la UE y toda la comunidad internacional.

Durante la clausura del XI Congreso Regional del PSOE de Canarias, Zapatero ha anunciado que el Gobierno adoptará nuevas medidas en favor de las pequeñas y medianas empresas, mediante actuaciones que promuevan su capacidad de crédito y de financiación.

"Muy consciente" de los problemas de las pymes, Zapatero ha prometido "una acción fuerte", que ayude a su actividad económica y que permita mantener sus empleos.

Y lo va a hacer convencido de que la sociedad, las empresas y los trabajadores españoles, así como sus representantes, "están a la altura de las circunstancias" y van a ser capaces de compartir el esfuerzo que hay que hacer para salir "cuando antes de la crisis".

En palabras del presidente, todos ellos saben que el Gobierno "va a estar en primera línea, decidido y comprometido", escuchando las sugerencias y propuestas, incluso las que "puedan resultar más complejas".

"Seguiremos tomando nuevas medidas", ha insistido, y ha argüido que lo permiten las cuentas públicas del país, habida cuenta de que España tiene una deuda 20 puntos por debajo de la medida europea.

Con una "plena confianza" en España y en sus capacidades, el también secretario general de los socialistas ha garantizado que la economía española se recuperará "antes de lo que algunos vaticinan".

Bajo el prisma de Zapatero, las respuestas necesarias para que España continúe su recuperación económica, su capacidad de crecimiento y de crear empleo, así como la extensión de las políticas de bienestar, dependen en gran medida de que el conjunto de la UE y de la comunidad internacional sean capaces de poner un nuevo rumbo a una economía más productiva, justa y solidaria.

"Que nadie se equivoque, que nadie se engañe", ha alertado el dirigente socialista después de insistir en que lo sucedido en los últimos tiempos ha demostrado que "el mundo está interrelacionado".

Por eso, ha ratificado la necesidad de reformar el orden financiero internacional "a fondo", pero, a la vez, ha señalado que hay que recuperar los compromisos de los Objetivos del Milenio.

Sin olvidarse tampoco de la conveniencia de favorecer los acuerdos comerciales para que los países más pobres tengan más posibilidades, ni del compromiso de las grandes potencias contra el cambio climático.

"Para que haya cambios reales" es la razón por la que, según ha resumido, ha trabajado en las últimas semanas, esforzándose para que España esté presente en la "trascendental" cumbre del G-20 el próximo día 15 en Washington.

Tras constatar que las respuestas a la crisis del sistema financiero internacional y del estancamiento económico están en las ideas socialdemócratas, Zapatero ha juzgado que en el momento actual hay que "ponerse al frente" y estar cerca de quienes tienen más dificultades.

Eso es "lo que hace y hará el Gobierno", ha constatado Zapatero antes de desgranar todas las medidas adoptadas por su Ejecutivo desde hace meses para ayudar a las familias más humildes.

Ha sido en ese contexto en el que ha afirmado que el Gobierno "no regateará esfuerzos, ni determinación, ni compromiso", y que "no se dejará llevar por cantos de sirenas" de los que temen por el aumento del gasto social y público.

Desde la seguridad de que estos gastos pueden ser eficaces, Zapatero ha defendido que una sociedad cohesionada socialmente es más capaz de atender las situaciones adversas y ha puesto el acento en que las posibles dificultades presupuestarias no van a llegar ni a parados ni a pensionistas ni a los más necesitados.

España, ha dicho el presidente, ha recorrido en 30 años de democracia el camino "al que otros tuvieron que dedicar más tiempo", razón por la cual está seguro de que el país "va a saber recuperar" su capacidad de crecimiento económico.