Iñaki Arteta da voz a los exiliados del terrorismo en "El infierno vasco"

Valladolid.-  Iñaki Arteta da voz a los exiliados del País Vasco, personas que han tenido que dejar su región y emigrar a otras partes de España para huir de las presiones, amenazas y extorsiones de ETA, en su último trabajo, titulado "El Infierno Vasco" y estrenado en el Festival de Valladolid.

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(EFE)

El director de cine Iñaki Arteta participa en la 53ª edición de la Semana Internacional de Cine de Valladolid (SEMINCI) en la sección Tiempo de Historia con la película "El infierno vasco", sobre las personas que han tenido que huir del País Vasco por motivos de seguridad, extorsionados por ETA o por la presión del nacionalismo imperante.

El documental, proyectado dentro de la sección Tiempo de Historia, ofrece el testimonio de quince personas que han padecido el acoso de la banda asesina y que han tenido que irse del País Vasco.

Un punto rojo que marca el País Vasco sobre el mapa de España es el inicio de "El Infierno Vasco", una cinta que trata de reivindicar una vez más la libertad de las personas y el valor de la democracia en una sociedad marcada por el terrorismo, en la misma línea que otros trabajos de Arteta.

"Alrededor de las víctimas potenciales hay muchos ciudadanos que no pueden escapar de la presión lingüística y cultural, lo que ha hecho que cantidad de personas hayan tenido que irse", ha afirmado Arteta durante la presentación de la película en Valladolid.

Acompañado de dos de los protagonistas del filme: la periodista Tonia Etxebarria y el profesor Mikel Arzormendi, el director ha considerado que aunque "lo más dramático son las víctimas mortales", éstas "han eclipsado una tragedia cuantitativamente peor: la de los amenazados por ETA".

Desde hace cuarenta años, más de doscientos mil ciudadanos vascos han tenido que huir de su tierra por motivos de seguridad, escapando de la extorsión de los terroristas o de la presión del nacionalismo gobernante.

Por ello, Arteta ha pretendido "mostrar una realidad que más o menos la ciudadanía conoce" a través de las experiencias de un sacerdote, profesores, periodistas, empresarios, ex concejales de ayuntamientos y varios ertzainas que viven fuera del País Vasco para poder desarrollar una vida normal.

La filmografía de Arteta ha girado en torno a las consecuencias de la violencia de ETA y su preocupación por las víctimas desde que en 1988 rodó su primer largometraje, "Material sensible".

Tras esta película filmó "Sin libertad" (2001), un cortometraje de media hora dedicado a las víctimas de ETA, por el que recibió en 2002 el primer premio al mejor director de documental en el Festival Internacional de Cine y Vídeo Independiente de Nueva York.

"Voces sin libertad", una ampliación en cincuenta minutos de los testimonios recogidos en "Sin libertad", fue su siguiente trabajo, que vio la luz en 2004, el mismo año que "Agustín Ibarrola, entre el arte y la libertad", un documental biográfico sobre este artista vasco que también ha sufrido la persecución de los violentos.

Su siguiente fue "Trece entre mil" (2005), que recoge otros tantos testimonios de afectados por atentados terroristas durante las décadas de los setenta y ochenta en Madrid, Barcelona y el País Vasco.