El oficialismo boliviano cambiará las "autonomías" en el proyecto de Constitución antes del referendo

La Paz.-  El Gobierno de Bolivia planea cambiar en el Congreso el capítulo de autonomías del proyecto de nueva Constitución que promueve el oficialismo, antes de someterlo a referendo, según afirmó hoy el viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Sacha Llorenti.

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(EFE)

El Gobierno y la oposición autonomista dieron por finalizado ayer, sin que se firmara ningún acuerdo, el proceso de diálogo abierto en Cochabamba para pacificar el país tras la ola de violencia registrada en septiembre y que provocó al menos 18 muertos.

El viceministro, en entrevista con Red Uno, dijo que "inmediatamente, antes del referéndum" se va a incorporar al proyecto constitucional los avances en autonomías que se lograron con los prefectos (gobernadores) de oposición en el diálogo abierto hasta ayer en Cochabamba (centro).

Llorenti agregó que "probablemente sea el Congreso el que tenga que incorporar estos acuerdos en el nuevo texto constitucional", que fue aprobado por la Asamblea Constituyente en diciembre pasado, en una última sesión celebrada casi sin presencia de opositores.

El Gobierno y la oposición autonomista dieron por finalizado ayer, sin que se firmara ningún acuerdo, el proceso de diálogo abierto en Cochabamba para pacificar el país tras la ola de violencia registrada en septiembre y que provocó al menos 18 muertos.

El Congreso se convierte ahora en el escenario de la crisis, ya que el oficialismo pretende aprobar la ley de convocatoria de los referendos que requiere para entrar en vigor la nueva Constitución, que rechaza de plano la oposición.

El viceministro de Descentralización, Fabián Yaksic, en entrevista con la televisión ATB, dijo que para incorporar las demandas autonomistas de los opositores regionales serán modificados unos 30 artículos del proyecto constitucional.

El nuevo sistema de descentralización política dispondrá tres niveles de autonomía: departamental, municipal e indígena; jerárquicamente iguales y con competencias legislativas, según la agencia estatal ABI.

El otro tema central del diálogo en Cochabamba, el reparto territorial de las rentas petroleras provenientes del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), tampoco desembocó en un acuerdo definitivo aunque en las mesas técnicas también hubo avances.

El Gobierno, en diciembre pasado, desvió al menos un 30 por ciento de lo que hasta entonces correspondía a los departamentos por el IDH al pago de la "renta dignidad", un bono de 200 bolivianos mensuales (alrededor de 28 dólares) que se paga a los mayores de 60 años.

El viceministro Llorenti aseguró que en Cochabamba "se ha acordado que a partir del próximo año tienen que subirse 50 bolivianos la renta dignidad" y que "se ha demostrado que no ha habido la confiscación" de los recursos del IDH que denunciaban las prefecturas.

Por otro lado, los movimientos sociales afines al Gobierno han ratificado que el próximo 13 de octubre iniciarán una marcha hacia La Paz para presionar al Congreso a que convoque los referendos sobre el nuevo proyecto de Constitución.

Fidel Surco, presidente del Consejo Nacional por el Cambio (Conalcam), organización que agrupa a los movimientos sindicales y campesinos que apoyan a Morales, dijo a la televisión estatal que "es el momento de refundar Bolivia desde el nuevo texto constitucional".

"No se asusten en la ciudad de La Paz. Esta marcha es pacífica. Más bien es una fiesta democrática", aseguró el líder campesino, aunque también agregó que su movimiento no puede esperar más para que se apruebe la nueva Constitución.