Calatrava propone soluciones para evitar los caídas en el puente de Venecia

Roma.-  El arquitecto español Santiago Calatrava propuso al ayuntamiento de Venecia algunas modificaciones en el puente que proyectó en el Gran Canal, abierto al público el pasado día 11, para evitar que se sigan produciendo caídas y resbalones entre quienes lo cruzan.

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(EFE)

El arquitecto español Santiago Calatrava propuso al ayuntamiento de Venecia algunas modificaciones en el puente que proyectó en el Gran Canal, abierto al público el pasado día 11, para evitar que se sigan produciendo caídas y resbalones entre quienes lo cruzan.

Según informó la prensa italiana este fin de semana, desde la apertura de la pasarela se han producido múltiples resbalones y caídas y diez turistas han tenido que ser atendidos en el hospital.

En una nota, el estudio Calatrava informó hoy de que ya el pasado 23 de septiembre envió a los técnicos del Ayuntamiento de la ciudad de los canales un informe sobre cómo resolver estos incidentes.

El "problema" es que la obra de Calatrava tiene escalones más largos que otros, que obligan a mirar siempre por donde se camina, mientras que el cristal que reviste alguno de ellos es a veces engañoso sobre la inclinación del peldaño.

Calatrava explica en su nota que este tipo de escalones son normales, que son habituales en el resto de puentes de Venecia, debido al semiarco necesario para que puedan pasar las barcas por debajo.

El arquitecto considera que el problema es más una cuestión de "percepción" de cada persona que un problema "técnico".

A pesar de ello, y ante la petición del ayuntamiento, propuso que se sustituyan los veinticuatro peldaños de cristal (aquellos más largos) con otros de traquita (piedra volcánica), material ya presente en algunos tramos del puente.

"Es un trabajo fácil, que se puede completar en una o dos noches, si se quiere evitar tener que cerrar el puente", añade Calatrava.

Respecto a otro de los problemas presentados, algunos puntos salientes en los monolitos de las extremidades del puente y con los que podían tropezarse algunas personas con problemas de vista, el arquitecto español también dio un par de soluciones.

"Todos estas modificaciones se pueden hacer con un presupuesto limitado y en un tiempo breve. Se trata de una decisión que tiene que tomar el director de las obras del ayuntamiento", indicó Calatrava.

No obstante, el ayuntamiento de Venecia explicó hoy que no se realizarán cambios en la obra arquitectónica y que se limitarán a avisar con carteles a los viandantes que tengan cuidado con los peldaños.

Según la concejala de obras públicas de Venecia, Mara Rumiz, el problema es sólo de "percepción", por lo que la solución "menos complicada y menos costosa" es la de avisar a las personas que crucen el puente, "como también sugirió el estudio de Santiago Calatrava".

Rumiz añade que cada día atraviesan la pasarela, el cuarto puente que cruza el Gran Canal, unas 15.000 personas, y que los incidentes por caídas son numerosos en Venecia cada día.

El puente está además desde hace algunos días vigilado por la policía municipal para evitar que los gamberros cometan daños a la estructura.